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Washington.— El antiguo líder del Cártel de Sinaloa Joaquín El Chapo Guzmán fue trasladado ayer a una prisión federal de máxima seguridad en el estado de Colorado, según confirmó su abogado.
“Está aquí. Acaba de llegar”, anunció Jeffrey Lichtman, defensor de Guzmán Loera, en declaraciones concedidas al diario local The Denver Post. El narcotraficante ingresó a una cárcel de Florence conocida como El Alcatraz de las Montañas Rocosas.
El Chapo Guzmán fue condenado el pasado miércoles a cadena perpetua por introducir grandes cantidades de droga a Estados Unidos. Fue sentenciado por ocho cargos de narcotráfico y crimen organizado, 30 años de cárcel por portar armas y otros 20 de prisión por blanqueo de dinero.
El principal cargo es el de narcotráfico, delito que suma una carrera de 25 años. Se calcula que en este tiempo movió 528 mil 276 kilos de cocaína, 423 mil de marihuana y 202 de heroína.
Esta decisión judicial puso fin a más de dos años de proceso y casi tres meses de juicio en el que declararon 56 testigos del gobierno estadounidense y solo uno de la defensa.
Pese a ello, el capo mexicano, que habló durante 13 minutos traducido por un intérprete, rechazó la condena y la pena, asegurando que “no hubo justicia”.
Asimismo, denunció que ha recibido un trato “cruel e inhumano”, porque ha pasado todo el proceso en confinamiento solitario, lo que, según denunció en su momento la defensa, le ha causado daños físicos y sicológicos.
El Alcatraz de las Montañas Rocosas. El Chapo fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, después de escaparse hasta dos veces de cárceles de máxima seguridad en México, la primera en 2001 y la segunda en 2015. Un año después fue detenido definitivamente.
Como parte de las medidas de seguridad extraordinarias que han marcado el juicio a El Chapo, los miembros del jurado han acudido al tribunal neoyorquino escoltados y sus identidades se han mantenido en secreto.
Ahora se espera que purgue la pena en la cárcel de máxima seguridad de ADX, en Colorado, conocida como El Alcatraz de las Montañas Rocosas, de donde nadie se ha fugado.
El capo mexicano, de 62 años de edad, ascendió al puesto del criminal más buscado de Estados Unidos, tras la muerte del exlíder de Al Qaeda Osama bin Laden en 2011.
El Cártel de Sinaloa aún es el principal distribuidor de droga en Estados Unidos entre los grupos delictivos mexicanos, seguido por el exponencial Cártel Jalisco Nueva Generación, según la DEA.
