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Cuernavaca, Mor.— Las naciones del Siglo XXI tienen el reto de consolidar su sistema penitenciario, en el que se consideren las nuevas amenazas en los distintos ámbitos de la seguridad, aseguró el comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS), Rogelio Miguel Figueroa Velázquez.
En la inauguración del Tercer Taller Latinoamericano de Gestión e Infraestructura Penitenciaria que se realiza en Cuernavaca, Morelos, acompañado por Anton Camen, jefe adjunto de la delegación regional del Comité Internacional de la Cruz Roja, que en conjunto con el OADPRS organizó el encuentro, al que asisten especialistas de países de América Latina, Figueroa Velázquez subrayó: “La consolidación de un sistema penitenciario es uno de los grandes retos que poseen las naciones del Siglo XXI”.
Destacó que “las dinámicas delictivas, las relaciones entre sectores sociales organizados, las nuevas amenazas en los distintos ámbitos de la seguridad son temas prioritarios de atención para los gobiernos democráticos en toda Latinoamérica y, me atrevería a señalar, en todo el mundo”.
Resaltó que esta situación tiene un impacto que va más allá del ámbito penitenciario, ya que involucra a la sociedad al ser todos corresponsables en los procesos de readaptación y reinserción social.
Más de 70 funcionarios y representantes de organizaciones internacionales trabajarán sobre la correlación que debe existir entre la gestión y la infraestructura penitenciaria que sea acorde con las normas y estándares internacionalmente conocidos como las “Reglas Nelson Mandela”.
Una de las primeras reglas se basa en que el sistema penitenciario no deberá agravar los sufrimientos que implican la privación de la libertad y el despojo del derecho a la autodeterminación de las personas detenidas, además de que todos los reclusos serán tratados con el respeto que merecen su dignidad y su valor intrínseco en cuanto seres humanos, entre otras.