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El grado de violencia con el que Samuel Lizárraga Ontiveros, El Tortillero, ejecutaba a sus víctimas era tal que en los cadáveres dejaba tortillas, como parte de su sello.

Originario de Sinaloa, Samuel Lizárraga tiene 34 años y es considerado uno de los principales generadores de violencia que ocurre en el sur de esa entidad. Sus adversarios y las autoridades lo identifican por el alto grado de violencia que ejerce en contra de sus víctimas.

Dentro de Los Mazatlecos, el brazo armado de los Beltrán Leyva que Lizárraga lideró en los últimos años, sus subalternos lo conocían también como El 14 Maza o El Señor del Charco, porque se decía dueño del puerto de Mazatlán, en disputa con el Cártel de Sinaloa.

Según reportes del gabinete de seguridad, Lizárraga Ontiveros se caracterizaba por infundir miedo a los integrantes de la organización, para que hicieran encargos que les pedía, como matar o reclutar a jóvenes.

A los que les solicitaba juntar más gente, les daba un celular, 3 mil pesos cada 10 días y apoyos para la gasolina y el transporte de los nuevos integrantes de Los Mazatlecos, a quienes mandaba a combatir a los grupos criminales rivales en otros estados del país.

Su hermano, Geovanny Lizárraga Ontiveros, El 120 o El Desconocido, detenido el 15 de mayo de 2011 en el municipio de Los Mochis, era considerado por las autoridades federales y estatales como el mayor distribuidor de drogas en el estado de Sinaloa.

Un grupo de pistoleros intentó rescatarlo, pero no lo lograron; sin embargo, durante el enfrentamiento, dos agentes de la Policía Ministerial local resultaron heridos, así como otros tres civiles.

Al igual que su hermano El Tortillero, Geovanny Lizárraga era un narcotraficante violento al que las autoridades identifican como autor de matanzas en las localidades de Guasave, Ahome y El Fuerte, en donde ejecutó a decenas de policías. También se le relaciona con narcofosas halladas en Los Mochis.

El Tortillero era el 108 de los 122 objetivos prioritarios del gabinete de seguridad, y presunto responsable de la violencia en el sur de Sinaloa.

Los Mazatlecos fueron fundados por los hermanos Beltrán Leyva, para combatir al Cártel de Sinaloa, de El Chapo Guzmán e Ismael El Mayo Zambada, tras romper su alianza en 2008. Desde ese año, los hermanos Beltrán Leyva mantienen una férrea disputa con El Chapo.

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