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Como una institución diseñada en el marco constitucional por la política de seguridad del gobierno federal, la Guardia Nacional debe mantener el respeto a la soberanía de los estados, a los que les corresponde la competencia originaria de mantener la paz y el orden público , afirmó el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién.
Al participar en las audiencias públicas que se realizan en la Cámara de Diputados , en donde se discutirá la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador , para aprobar la creación de la Guardia Nacional , el mandatario queretano dijo que el nuevo cuerpo de seguridad que se propone crear debe mantener el respeto a la soberanía de los estados , a los cuales les corresponde la competencia originaria de mantener la paz y el orden público.
La Guardia Nacional , enfatizó Domínguez Servién , nunca debe alejarse de la disciplina y el profesionalismo, “pero esencialmente que se encuentre al mando de funcionarios de condición civil”. La igualdad social a la que aspiran los mexicanos, puntualizó, se podrá alcanzar cuando se tengan herramientas y parámetros eficaces que garanticen una buena seguridad pública .
Por ello, Domínguez Servién subrayó, es necesario promover la denuncia , lo que implica tener mayor conocimiento del delito, pero advirtió que confundir el registro de la denuncia con la incidencia delictiva como se hace actualmente, “es uno de los errores más graves que se han cometido desde que se ha tratado de medir la delincuencia”.
Y precisó: “Se debe promover la denuncia como acceso a la justicia penal, cerrándole la puerta a la impunidad, abriendo el fortalecimiento de capacidades institucionales de acuerdo a cada entidad”.
Los criterios de distribución de recursos a los estados y municipios, enfatizó, debe responder a las capacidades institucionales, “pues por más de 20 años la fórmula población-incidencia delictiva, ha demostrado que es errónea. Ningún estado con grandes problemas de seguridad ha mejorado sustancialmente en dos décadas, debido a que no hay una métrica aceptada y sobre todo legitimada por la sociedad”.
