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Tras la detención en Zapopan de Rosalinda González Valencia, esposa de Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, el gobierno de Jalisco mantiene por tiempo indefinido una “alerta de seguridad” ante posibles represalias por parte del grupo delictivo.
“Seguimos con la coordinación entre los tres niveles de gobierno, sobre todo por los hechos de la semana pasada [el atentado contra el ex fiscal Luis Carlos Nájera]; también el sábado por la noche estuvimos rápidamente en una coordinación con los presidentes municipales, los comisarios y el fiscal”, señaló el secretario general de gobierno de Jalisco, Roberto López Lara.
Reiteró que desde hace tiempo este grupo delictivo ha amenazado al mandatario estatal, Aristóteles Sandoval, y que se ha reforzado el patrullaje en la zona metropolitana de Guadalajara, por lo que se ha ordenado que ninguna unidad haga sus rondines sola.
Tras la captura de González Valencia comenzó a circular la versión de que policías municipales de Zapopan habían acudido a la avenida Royal Country, la lujosa zona residencial en donde ocurrió el arresto, para intentar impedirlo. Al respecto, López Lara señaló que hubo una denuncia de un secuestro y por ello acudieron los elementos del municipio.
El funcionario señaló que en el estado no se seguía ninguna investigación contra González Valencia, que todo el operativo se realizó por parte de las fuerzas federales y sólo se tuvo conocimiento de éste hasta que la mujer fue capturada y se solicitó el apoyo estatal.
La Secretaría de Salud del estado informó que el estado de salud de la madre de Tadeo, quien murió hace una semana durante los narcobloqueos, sigue siendo grave, al igual que el de uno de los escoltas de Nájera.
Además, la dependencia señaló que uno de los policías lesionados durante el atentado ya fue dado de alta, por lo que sólo siguen hospitalizadas ocho de las 13 personas heridas ese día.
