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El tema de la seguridad entre México y Estados Unidos depende de la voluntad de la DEA (Administración de Control de Drogas) y cada crisis nueva está a la voluntad de esta agencia, afirmó el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.
En la 33 Reunión de Embajadores y Cónsules, Ebrard Casaubon tuvo encuentros con los que están adscritos en Estados Unidos y Canadá, a quienes dijo que la intención mexicana es que en materia de seguridad con la Unión Americana se tenga un marco no tan asimétrico e impredecible.
“Porque los acuerdos de seguridad de Estados Unidos han dependido de la voluntad de la DEA, ¿qué tanto funciona? Hasta que la DEA quiera, depende de cada crisis nueva que tenemos, que se le ocurrió algo nuevo a la DEA”, dijo.
Añadió que con el Acuerdo Bicentenario en materia de seguridad se pretende tener un escenario predecible y medible sobre en dónde están ambas naciones, y con ello reducir posibilidades disruptivas.
“Entonces, el objetivo es tener algo más compartido, métricas comunes que México ha introducido, otros elementos como es el tema de las armas, que es [Estados Unidos] corresponsable de lo que está pasando”, detalló el secretario.
La misma situación se tiene, expuso, en el tema del fentanilo, que esencialmente es una crisis creada por la industria farmacéutica, “a diferencia de otros estupefacientes que vinieron de fuera, por decirlo así, del sistema legal, o eran tolerados y luego cambió su estatus legal”.
Indicó que México y Estados Unidos tienen que cooperar y disponer de una estrategia común frente a un fenómeno que en el interior del establishment farmacéutico es un paradigma distinto.
En migración pidió trabajar para convencer a Estados Unidos de que es necesario un cambio en su sistema, aunque reconoció que en el corto plazo no será viable, pero se puede apostar a que sea en el mediano.
Cambios en la OEA
Se refirió a que México planteará cambios a la Organización de Estados Americanos (OEA), la cual no funciona porque solamente se ha dedicado a temas electorales.
Añadió que se propondrán cambios, modificaciones y, sobre todo, acuerdos entre Estados Unidos, Canadá, América Latina y el Caribe.
