Aunque el país registra una nueva ola de contagios en las últimas dos semanas, que no ha impactado en el número de decesos, especialistas consultados por EL UNIVERSAL coinciden en que el gobierno minimiza la variante ómicron, por lo que sigue sin tomar medidas para evitar un mayor avance, como permitir la llegada de extranjeros, sin ningún protocolo sanitario; abrir las escuelas para tomar clases presenciales y negarse a realizar una fuerte campaña para el correcto uso de cubrebocas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que ómicron es muy contagiosa, pero aseguró que no se registran, todavía, incrementos en hospitalizaciones. Rechazó que se rebase la capacidad hospitalaria o que los fallecidos se equiparen a la tercera ola, en agosto pasado.
En una revisión de los conteos diarios que realiza la Secretaría de Salud (Ssa), en cuanto a las defunciones, en lo que va de la primera semana de 2022, se han registrado 673, es decir, un promedio diario de 96 muertes asociadas a coronavirus. Estos números son más bajos que los dados a conocer el mes anterior, cuando hubo mil 69 defunciones, un promedio de 106 diarias.
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Sin embargo, Arturo Erdely, doctor en Ciencias Matemáticas por la UNAM, señala que es muy pronto para que se reflejen las muertes a causa de esta variante, pues la curva de fallecimientos va desfasada cuatro semanas.
“El Presidente dice cosas fuera de la realidad, siempre está minimizando. No llevamos ni dos semanas de que despegó todo esto con ómicron (...) Primero se disparan los contagios, después se ve el impacto en hospitalizaciones y luego, en muertes.
“Hasta ahí vamos a saber qué tan fuerte o no es el impacto en defunciones. Hablar ahorita de que no se están presentando tantas muertes es absurdo”, dice.
Agrega que en al menos 17 municipios ya tienen ocupación de 100% en camas de hospitales generales: “Destacan tres alcaldías de la Ciudad de México: Tláhuac, Iztacalco y Azcapotzalco”.
Médico cirujano y maestro en Administración Hospitalaria, Adán Navarro comenta que la velocidad de contagio de ómicron es similar a la del sarampión, ya que por cada nuevo contagio se replica en 10 más.
“Las mutaciones que ha tenido ómicron la han hecho mucho más contagiosa. De hecho, es el virus más contagioso en toda la historia de la humanidad. No se conocía un virus así, excepto el del sarampión”, explica.
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Indica que con ómicron “los casos van a aumentar muchísimo, no por cientos, por millones. Es previsible que los medicamentos más comunes para contrarrestar los síntomas puedan acabarse en semanas.
“Todo esto se está minimizando, porque la economía del país no es tan fuerte como para poder sobrevivir un cierre más”, dice.
En tanto, Héctor Rossete, de la Unidad Básica de Prevención, expresa que esa variante evade la respuesta inmune de algunos vacunados. Si bien los síntomas leves se han presentado en su mayoría entre personas previamente inoculadas, aún no existe la suficiente evidencia de sus estragos en personas que no tienen alguna de las vacunas, agrega.
“No se ha visto todavía el efecto en personas que se niegan a ser vacunadas. En nuestro país poco más de 50% está vacunado con esquema completo, no hay refuerzo de vacuna (...) No se puede hablar sobre algo que aún no está escrito porque apenas estamos sobre la marcha”, expresa.
Externa que es preocupante la velocidad con la que aumentan los contagios en México: “El gobierno ha rechazado implementar una estrategia de prevención porque no cree en ellas, por eso ves a muchos funcionarios en reuniones, en lugares cerrados y sin cubrebocas. No cantemos victoria porque aún no sabemos si perderemos más personas”.
Considera que hacer ver a la variante ómicron como un cuadro gripal que no provoca mayores complicaciones, “es provocar una falsa confianza”.
Por su parte, Héctor Hernández Bringas, investigador y académico de la UNAM, sostiene que desde el inicio de la pandemia el gobierno la ha desdeñado: “Esta actitud ha sido una valoración muy baja de la situación crítica que estamos viviendo.
“Esta postura del gobierno va a tener consecuencias importantes en saturación de hospitales. Apenas estamos viendo ciertas señales. Será uno de los errores que en su momento tendrá que asumir este gobierno”, afirma.
Para Hernández, “existen señales inequívocas de que en febrero veremos una situación completamente crítica”.
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