Organizaciones de la sociedad civil, exaspirantes a ómbudsman y asociaciones empresariales reprueban la reelección de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), al asegurar que seguirá encubriendo violaciones graves a las garatías de los mexicanos.
“La designación manda un mensaje de profundo desdén y de imposición de parte del partido mayoritario, pues se contrapone con la defensa de las personas víctimas de violaciones a los derechos humanos y con la posición de cientos de organizaciones de la sociedad civil que señalamos su desempeño parcial y a favor del gobierno. Deja claro, además, la intención de continuar encubriendo graves violaciones a los derechos humanos como las cometidas por las Fuerzas Armadas”, considera Artículo 19.
Expresa que la designación de Piedra Ibarra por parte de la bancada de Morena y aliados en el Senado manda un mensaje de profundo desdén y de imposición de parte del partido mayoritario.
Indica que México atraviesa una profunda crisis de derechos humanos y esta reelección deja sin respuesta a quienes demandan una institución que confronte los abusos de poder.
Carlos Pérez Vázquez, exaspirante por tercera ocasión a la titularidad de la CNDH, señala a EL UNIVERSAL que el proceso de la Cámara Alta para elegir al ómbudsman tiene muchas áreas oscuras que deberían corregirse para próximos procesos.
“Hace 10 años cuando resultó electo Luis Raúl González Pérez como hace cinco años cuando ganó Rosario Piedra, y en esta ocasión de su reelección, los procedimientos de selección permiten mucha discrecionalidad y tienen amplios espacios de oscuridad”, subraya.
Expone que con la reelección, los más afectados son las víctimas de violaciones a los derechos humanos y la institución que, a su juicio, merece un despegue porque está subutilizada y tiene un potencial inmenso que no se ha aprovechado.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) que desde el inicio del proceso advirtió sobre los riesgos de la reelección, considera que en la reelección de Piedra Ibarra como titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos se ignoraron los estándares internacionales sobre la no reelección del ómbudsman.
“Lamentamos la reelección de la persona titular de la CNDH. Se premia indebidamente una gestión caracterizada por el debilitamiento institucional, la inacción y la pérdida de autonomía. Se ignoraron los estándares internacionales sobre la no reelección del ómbudsman. Mal mensaje sobre el lugar de los derechos humanos y la rendición de cuentas en el sexenio que inicia”, apunta.
El Centro Prodh había difundido su postura sobre la reelección de Piedra Ibarra al detallar que si bien su gestión ha emitido más recomendaciones que en sexenios anteriores, disminuyó la calidad de éstas.
“Se observan omisiones significativas en casos que involucran a las Fuerzas Armadas y avanzó la opacidad en las recomendaciones con testados excesivos”, dice la ONG.
Asegura además que la comunicación de la gestión de Piedra Ibarra ha sido pendenciera y politizada. Emitieron más de 40 pronunciamientos para desacreditar a medios, periodistas, órganos internacionales y defensores de derechos humanos: “La prioridad parece haber sido proteger al gobierno, no a las víctimas”, resalta el Centro Prodh.
A su vez, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) resalta que Piedra Ibarra al frente de la CNDH ha evidenciado una preocupante cercanía con el poder, comprometió la independencia del organismo y dejó a miles de personas víctimnas de abusos en situación de vulnerabilidad.
Argumenta que el cargo de ómbudsman demanda un liderazgo que privilegie la objetividad y la independencia sobre los intereses partidistas y de cercanía con el poder.
“Las decisiones tomadas en la CNDH deben responder a una visión de justicia, dignidad y respeto a los derechos humanos, no a un control centralizado que diluye su misión. La autonomía de la CNDH es fundamental para que se mantenga su labor como defensora de las personas, sin favoritismos ni subordinación a ningún poder”, explica.
La Coparmex externa también que en este proceso preocupa que se haya ignorado a las organizaciones civiles y la voz de la sociedad civil en esta selección, al privilegiarse un perfil cuestionado por amplios sectores y con evidentes deficiencias en el cumplimiento de su mandato.
“El Senado de la República menospreció las opiniones y propuestas de la sociedad civil, afectando la confianza en el organismo y en el propio proceso legislativo”, resalta.
A su vez, el director del Centro de Defensa de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, en Guerrero, Abel Barrera Hernández, considera que la reelección de Rosario Piedad Ibarra es negativa.
Barrera Hernández opina que en la reelección de Piedra Ibarra predominó el interés de grupo y no el interés de la población y, en particular, de las víctimas.
Barrera Hernández afirma que la CNDH que encabeza Piedra Ibarra dejó solas a las víctimas.
“Las víctimas se sienten solas, sin el apoyo, fueron descobijadas”, denuncia Barrera Hernández. Con información de Arturo de Dios Palma
