Ciudad Victoria, Tamps.— No sólo fue el fuerte operativo el que blindó la toma de posesión del morenista Américo Villarreal como gobernador de Tamaulipas, sino el apapacho también de las tres corcholatas con el visto bueno presidencial las que arroparon el evento en la ciudad fronteriza, mismo que terminó siendo también un cónclave para el lucimiento de quienes aspiran a la Presidencia en 2024.

En dos tiempos, en dos eventos, primero en el Congreso del Estado, donde rindió protesta y exhortó a la oposición a lograr acuerdos para iniciar el proceso de transformación de Tamaulipas, y después en un acto masivo en el recinto ferial, las corcholatas Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y el representante presidencial, Adán Augusto López, robaron reflectores.

En un ambiente festivo, pero siempre bajo la vigilancia de los hombres vestidos de verde olivo, la pasarela de corcholatas guindas inició desde su arribo al Congreso estatal.

Primero Sheinbaum, acompañada de sus colaboradores y con el vocero presidencial, Jesús Ramírez, a su lado. Selfies, muestras de apoyo y algunas tímidas consignas “es Claudia...”.

Adán Augusto López, más discreto, también se dejó querer por la clase política tamaulipeca y por los gobernadores Cuitláhuac García, Julio Menchaca y por el electo oaxaqueño, Salomón Jara.

Tarde, el canciller Marcelo Ebrard apareció también en el Congreso, y después en el acto popular, en primera fila saludó a propios y extraños debajo de la gran carpa que albergó a más de 5 mil personas a casi 40 grados.

“Presidenta, presidenta”, gritaron a la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, cuando Villarreal la presentó. Menos de medio minuto de consignas y continuó con la lista de invitados especiales.

Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, que no estaba programado a asistir, también robó reflectores, no con consigna, pero sí con cientos de selfies, abrazos y saludos.

Adán Augusto López, secretario de Gobernación, con la representación presidencial, también se dejó querer y fue aplaudido por los presentes, además de que atendió a quienes le solicitaron fotografías.

Quien también consiguió aplausos y felicitaciones fue Delfina Gómez, virtual candidata de Morena al Estado de México, quien se sumó a la batalla por las selfies y los abrazos.

Al final, más besamanos, fotos, abrazos, despedidas, todo bajo la mirada de militares fuertemente armados en el arranque del primer gobernador de Morena en Tamaulipas.

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