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Para este año, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) planteó reforzar su Instituto de Formación Política con la implementación de nuevas reglas y la creación del Centro de Investigación Sociopolítica y Económica, para lo cual puede disponer de hasta 12 millones de pesos.
El monto total para actividades específicas —como educación y capacitación para promover la participación política— que el partido podrá ocupar en 2020 es de 12 millones 564 mil 887 pesos, pero debe repartirlos también en actividades de promoción de valores cívicos y respeto a los derechos humanos.
El pasado 8 de diciembre, el PRD avaló reformar el reglamento del Instituto de Formación Política casi en su totalidad, con lo que se le dota de mayor transparencia y se fortalecieron las escuelas nacionales de Dirigentes y de Buen Gobierno.
En contraste con el reglamento vigente hasta diciembre, las responsabilidades del Instituto de Formación Política aumentaron, pues se detalla de qué manera deberá llevar a cabo el Plan Nacional de Formación Política, Capacitación, Investigación y Divulgación.
Además, será una de sus tareas contribuir a la elaboración de reformas para los documentos básicos del partido, así como en la conformación de plataformas electorales, agendas legislativas, planes de gobierno y políticas públicas de las administraciones perredistas.
El instituto también continuará siendo responsable de preservar el patrimonio del partido y difundir los trabajos del mismo a partir de publicaciones periódicas, como revistas y folletos. Y deberá crear redes de formadores políticos especializados, “que serán responsables de territorializar la formación de todos los afiliados”.
Entre las reformas destaca que la escuela de cuadros del PRD, además de tener un director general y tres directores ejecutivos (que conformarán el Comité de Direcciones) contará con un equipo técnico profesional y calificado que nombrará la Dirección Nacional Ejecutiva.
Además, para que el Instituto de Formación Política pueda ofrecer asesoría a los grupos parlamentarios del PRD en el Congreso de la Unión, se deberán celebrar convenios particulares entre ambas partes y lo mismo deberá suceder con la capacitación a los candidatos en procesos locales.
La organización de la Red Nacional de Formadores Políticos también sufrirá cambios, pues estará solamente integrada por personas afiliadas al partido, pero seguirá articulando iniciativas para la promoción de “la identidad política de izquierda”.
Por su parte, la Escuela Nacional de Dirigentes tendrá como objetivo profesionalizar a todas las personas afiliadas al partido, así como mantener actualizada la Red Nacional de Formadores Políticos y la Escuela Nacional de Buen Gobierno será la responsable de capacitar a los militantes electos para desempeñar un cargo público.
