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Los hechos de " violencia cruda " como el de Sinaloa o la agresión a la familia LeBarón , en Chihuahua, genera la desconfianza de la población hacia las autoridades, afirmó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
En conferencia de prensa, Rogelio Cabrera López, presidente de la CEM, indicó que a los obispos de México les preocupa la violencia que hay en el país, en especial con los hechos que han sucedido en las últimas semanas, pues destacó que propician que la población se cuestione el papel de las autoridades.
“Por supuesto que a los obispos nos preocupan mucho estos eventos crudos que hemos vivido el de Culiacán y el de Chihuahua, creo que esto genera en el pueblo un sentimiento de desconfianza hacia las autoridades, locales y federales, se preguntan cuál es el papel de la policía y la Guardia Nacional”, dijo.
Resaltó que la población se siente “insegura y con miedo”, como si estuviera en un “terreno minado”, destacó que el ataque a la familia LeBarón, la cual dejó como saldo a nueve personas, es una “ferocidad”.
”Tenemos una población anímicamente insegura y con miedo, esto se percibe a donde quiera que uno va a visitar las colonias, las parroquias la gente tiene esta sensación y mas cuando hay estos actos de violencia tan crudos el de Culiacán tan difícil de entender de ubicar y este otro que va directamente en contra de mujeres y niños, esto ya es una ferocidad mayor, tenemos que ver como nuestro país se detiene ante esta ola”, dijo.
Destacó que la próxima semana se llevará a cabo la 108 asamblea Plenaria de la CEM en la que abordarán temas como la violencia, la corrupción y la pobreza, así como el papel de la Iglesia Católica en la solución de estos problemas.
