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Los números son fríos y la realidad electoral alcanzó al PRI.

El músculo de la alianza Juntos Haremos Historia se hizo sentir en la Cámara de Diputados y en cuatro días, Morena, PT y Encuentro Social registraron a 138 diputados federales, que serán parte de su mayoría que son 308 legisladores en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

El tricolor siempre gozó de las mieles de ser mayoría y ocupar los primeros lugares en todo: en ocupar oficinas, comisiones, en la toma de decisiones y en el reparto de los recursos, pero hoy la realidad es otra.

Hoy, el ambiente y el contexto son distintos. El PRI es la quinta fuerza en San Lázaro y el registro de sus diputados se realizó al quinto día después de iniciado ese procedimiento.

Este viernes acudieron 43 de los 45 diputados priístas que tendrán curul en la Cámara de Diputados. Fueron discretos, sin grandes gritos, pero eso sí, se hicieron acompañar de asesores y acompañantes “pa’ hacer bola”, aseveró uno de ellos.

No hubo filas interminables ni abrazos efusivos con palmadas en la espalda, el trámite fue rápido y en tan sólo 40 minutos despacharon a los integrantes del tricolor. La realidad del PRI es siete diputados de mayoría y 38 plurinominales.

—¿Cómo les fue diputado? —se le cuestionó a un legislador que había formado parte de la Cámara Baja.

—De la chingada. A los únicos que les fue bien fue a los morenos. Vamos a ser poquitos, pero picosos. No queda más que echarle ganas —contestó.

Sobre esto, el ex líder nacional del PRI y próximo coordinador, René Juárez, dijo que en la 64 Legislatura, los priístas se van a ajustar a la realidad del tamaño de su bancada que será de 45 diputados.

En entrevista al acudir a registrarse como diputado, René Juárez dijo que llamar al PRI como que es parte de la chiquillada no es una expresión correcta y no la comparte.

“Chiquillada no me parece que sea una expresión correcta, no la comparto, en todo caso lo que habrá de ponderarse aquí son las propuestas, las ideas, las razones que habremos de esgrimir en cada uno de los temas y el espacio parlamentario nos permite precisamente tener esta presencia en todas las comisiones, a lo mejor no vamos a presidir muchas, pero vamos a tener presencia permanente, responsable, constructiva en cada una de ellas”, dijo.

Una histórica del PRI, Dulce María Sauri, quien fue gobernadora, dirigente nacional y senadora, regresó a la Cámara Baja y no tuvo empacho en reconocer que serán una fracción pequeña, pero con gran experiencia y capacidad, y pidió a los priístas quitarse la chaqueta de que todo lo saben y aprender de Morena, porque “ellos lo hicieron muy bien”.

Muerto el rey, que viva el rey.

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