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El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal Ávila, informó que con el programa de austeridad que propondrá a las otras bancadas de la Cámara Alta se logrará una reducción de al menos mil 500 millones de pesos en los gastos de operación en 2019.

Entre los rubros a eliminar se encuentran gastos en alimentos, que en 2017 ascendieron a 13.9 millones de pesos en desayunos, emparedados, fruta, comidas en salones, salón de sesiones y oficinas. Tan sólo en café, galletas, té y endulzantes, el gasto es de 1.4 millones de pesos.

Adicional a ello se buscará entrar a un proceso de “deschatarrización” de vehículos viejos, así como de vicios y privilegios que se mantienen a costa de la institución.

En las medidas inmediatas que propone Morena está dejar de rentar pisos en la Torre Azul, propiedad de Acción Nacional, que representan una erogación de más de 700 mil pesos mensuales.

“La Torre Azul es víctima de la austeridad”, dijo a los periodistas, y dejó en claro que “un programa de austeridad se lleva todo; no es una cosa personal contra el PAN”.

Agregó que dejar de rentar ese edificio es una decisión que se toma porque el Senado no se puede dar el lujo de sostenerlo en este momento en el que todas las áreas son objeto de medidas de ajuste. También se dejarán de rentar espacios de estacionamiento que se brindan a empleados de la institución.

Informó que el Senado tenía oficinas de diversas comisiones en la Torre Azul, las cuales ya han sido trasladadas a la sede oficial, que está enfrente, sobre Paseo de la Reforma.

El programa de austeridad será el primer acuerdo que se someterá a consideración de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), que busca bajar 30% al presupuesto de 2019, diseñado por 5 mil 200 millones de pesos.

Dijo que la dieta de los senadores de la Legislatura entrante también será reducida, y el monto del recorte se estima en 13 mil pesos mensuales. Además, ningún funcionario de la Cámara Alta podrá ganar más que los 105 mil pesos mensuales de un senador.

Reportó que se han liquidado mil 911 empleados de confianza y temporales, lo que representa un costo de 330 millones de pesos. En este ajuste están 500 empleados que solicitaron su retiro, y su liquidación aumentó una suma extraordinaria de 200 millones de pesos en la partida correspondiente.

La austeridad que deberán aceptar o rechazar las otras bancadas plantea restar la mitad de las subvenciones de mil 200 millones de pesos que reciben los grupos parlamentarios y que sumarían sólo 600 millones de pesos.

Se cancela el pago de gastos médicos mayores, desaparece la tarjeta IAVE, los celulares ya no serán pagados por el Senado ni habrá vales de gasolina, detalló.

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