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francisco.resendiz@eluniversal.commx
El presidente Enrique Peña Nieto ratificó ante directivos del banco más grande de Estados Unidos el compromiso de su gobierno por seguir construyendo un sistema financiero sólido que brinde certidumbre a la inversión.
Ayer, el Presidente de la República recibió en Los Pinos al presidente del consejo y director general del banco J.P. Morgan, Jamie Dimon —que se encuentra en una visita de trabajo a México—, a quien reconoció la confianza de este banco en México.
Hizo notar que el JP Morgan es el banco más grande de Estados Unidos en términos de activos y una de las instituciones financieras más importantes en el mundo.
La Presidencia resaltó que esta institución financiera atiende a empresas multinacionales y emergentes, inversores institucionales y particulares, y ofrece servicios bancarios y financieros a las corporaciones, los gobiernos y las instituciones más importantes del mundo, además de que tiene presencia en México desde hace más de 100 años.
En su sitio en internet, este banco tiene el apartado “La experiencia local. Los recursos globales. Un compromiso con México”, en la que destaca su centenaria presencia en territorio mexicano ofreciendo servicios de Commercial Bank, Investment Bank, Banca Corporativa Internacional, Private Bank, Treasury Services e Investor Services.
“Nuestra compañía proporciona a sus clientes una amplia gama de servicios integrados, que combinan conocimiento especializado con posiciones líderes a través de las distintas líneas de negocio”, refiere la institución bancaria.
Hace notar que J.P. Morgan tiene una fuerte presencia local, con oficinas en la Ciudad de México y Monterrey, y que sus clientes se benefician de la experiencia y fortaleza global de esta firma en toda la región de América Latina.
“Nuestro compromiso de ayudar a los clientes en América Latina se remonta al siglo XIX. Como resultado de esta presencia de tantos años, hemos creado relaciones de confianza a largo plazo con líderes industriales, instituciones financieras, gobiernos, empresas familiares y clientes privados en toda América Latina”, apunta J.P. Morgan.
Señala que su compromiso es crear comunidades “vibrantes”, conservar el medio ambiente y fomentar una cultura de inclusión en todo el mundo que beneficie a las personas de hoy y a las generaciones del futuro.
“Para lograr estos objetivos y maximizar las contribuciones, nuestros programas de responsabilidad corporativa en América Latina reflejan nuestros objetivos filantrópicos en las áreas de desarrollo de comunidades, educación, arte y cultura.
“Los esfuerzos filantrópicos apoyan a las comunidades locales y a un gran número de programas locales de microfinanciamiento y microemprendimiento”, señala.
J.P. Morgan señala que es una empresa líder global en servicios financieros que ofrece soluciones a corporaciones, los gobiernos y las instituciones más importantes del mundo en más de 100 países, además de que esta firma y su fundación donan aproximadamente 200 millones de dólares anuales a organizaciones sin fines de lucro en el mundo.
