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nacion@eluniversal.com.mx
El Instituto Nacional Electoral (INE) se dijo dispuesto a registrar y credencializar a 40 millones de niños “sin ninguna complicación”, con costos marginales, y mantenerse como la autoridad del Estado responsable de la administración de los datos de identidad de los mexicanos.
En vísperas de que inicie en el Congreso de la Unión la discusión sobre la reforma electoral, el consejero Marco Antonio Baños Martínez, presidente de la Comisión del Registro Federal de Electores (RFE), informó ayer que se propuso a la Secretaría de Gobernación (Segob) la posibilidad de que la credencial del INE cambie su diseño y “tenga dos caras: por un lado, los datos electorales del ciudadano; por el otro, la información propia de la cédula de identidad”, con lo que se evitaría duplicar presupuestos.
El organismo invierte mil 500 millones de pesos anuales en mantener actualizada la base de datos de 89.3 millones de electores y expedir la credencial para votar con fotografía de manera gratuita para los ciudadanos mayores de 18 años.
La Secretaría de Gobernación, apuntó Baños Martínez, propone crear un Instituto de Identidad que administre los datos de adultos y 40 millones de menores de edad, de los cuales no hay ningún registro, pero generar otra credencial o una base de datos espejo, eventualmente, implicará un doble gasto.
“Estaríamos creando un problema de confianza ya superado, porque las listas de quién puede y no puede votar se iría de nuevo a la órbita de los gobiernos en turno”, alertó, ya que desde 1990 se levantó un padrón electoral “con la certeza de que no votarían muertos ni se rasurarían registros según lo decidiera una administración”.
Además, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, argumentó las razones financieras: “En los tiempos de austeridad que corren lo mejor es no inventar el agua tibia”, y generar ahorros significativos sin duplicidad de funciones.
Esto será posible, añadió, al mantener al INE como administrador de los datos de identidad de los mexicanos, así como una reforma legal que le permita proporcionar un documento de identidad a los menores de 17 años.
Córdova Vianello dijo que el padrón de electores es la base de datos más confiable, con 89.3 millones de registros; 100% tienen asociados datos biométricos: 80.53% con 10 huellas dactilares, 19.47% con huellas de dedos índice.
Detalló que para que el Estado cumpla con su responsabilidad de proporcionar un documento de identidad a los menores de 17 años hay dos rutas: “[La primera es] la más costosa, construir un nuevo mecanismo de identidad para todos los mexicanos menores; la segunda, el camino sencillo, de bajo costo, aprovechando la infraestructura tecnológica, material y humana, y el prestigio público de casi tres décadas [del INE]”, para que en sus mil módulos se dé un documento de identidad a los niños.