Aunque durante años operó un “Pemex pirata” paralelo a la paraestatal, para robar cientos de miles de litros de gasolina, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró “punto final” en la persecución de quienes así saquearon a la industria desde altos cargos directivos.
“Soy partidario, en este caso, del punto final y de que iniciemos una etapa nueva”, dijo al insistir en que p erseguir la corrupción del pasado es llevar a “chivos expiatorios” a la justicia y quedarse empantanado en acusaciones, juicios y denuncias sólo para generar legitimidad .
“Vamos a ser inflexibles, estrictos en lo que a nosotros nos corresponde. Es cero corrupción, cero impunidad, a partir de nuestro gobierno”, garantizó al recordar, empero, que desde el gobierno del presidente Vicente Fox empezó el saqueo de gasolina de Pemex desde las mismas refinerías y no sólo desde la perforación de ductos para extraer ilegalmente el combustible.
“¿Ustedes creen que un director de Pemex actuó, en el caso de que se cometió un ilícito, por su cuenta. Miren, en el país, y esto ya debe de quedar claro, un negocio jugoso ilícito siempre lleva el visto bueno del presidente. Lo mismo en los estados. ¡Ya basta de hipocresía¡”, advirtió.
El mandatario dijo empero que están abiertas las instituciones para que todo el que tenga pruebas sobre ilícitos que se cometen pueda presentarlas y pueda denunciar, “nosotros no nos oponemos a eso. Incluso, no se va a detener ninguna investigación”.
Ahora se inicia el plan contra el huachicoleo –presentado ayer- y el que siga robando será castigado, ofreció.
López Obrador anticipó que así como ayer puso en marcha un plan anti huachicoleo, prepara una estrategia para enfrentar otro mal que saquea las arcas nacionales y que es el uso de facturas falsas
“Así también adelanto, vamos a actuar en el caso de las facturas falsas, de la doble facturación. Es también una gran evasión fiscal”, advirtió.