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La defensa del ex procurador general de Nayarit, Édgar Veytia, sigue sin conseguir un acuerdo de culpabilidad para su cliente, lo que obliga a posponer de nuevo la audiencia judicial para determinar si va a juicio por tres cargos de narcotráfico que enfrenta en la Corte Federal del Distrito Este de Nueva York, en Estados Unidos.
Tras más de 15 minutos de discusión en privado entre fiscalía, defensa y la juez del caso, Carol Amon, todas las partes decidieron aplazar la vista para intentar llegar a un acuerdo o directamente ir a juicio, programado para el próximo 11 de diciembre.
Su abogado Jeffrey Lichtman insistió en la incertidumbre sobre el futuro de su cliente. “Vamos a continuar hablando, vamos a seguir intentando resolver el caso si es que podemos con un acuerdo, aunque no puedo decir con ninguna garantía que vaya a haber un acuerdo”, dijo a la salida de la audiencia de ayer.
Para justificar el retraso en la resolución de si hay acuerdo o no, negó que esté enfrentando “resistencia” de la fiscalía, y más bien culpó a las “muchas y diferentes capas en el gobierno” y la gran cantidad de funcionarios de diferentes departamentos que deben ser consultados antes de aprobar una resolución.
Según explicó, el caso es “altamente complicado y muy importante” que atañe a dos países, EU y México, lo que dificulta su resolución. Lichtman, sin dar detalles sobre la estrategia o qué está intentando conseguir para resolver el caso, sólo dijo “tener una estrategia: sacarlo de la cárcel lo antes que se pueda (…) de una forma u otra”, y para ello está analizando y proponiendo “cuidadosamente” todas y las opciones sobre la mesa.
Veytia está encarcelado en el Metropolitan Detention Center de Brooklyn desde que fuera detenido en San Diego y trasladado a Nueva York a finales de marzo.
La próxima vista oral del caso está prevista para el 9 de noviembre, justo un mes antes de la fecha acordada para el inicio del juicio. Si no se llega a un acuerdo para entonces, lo más probable es que Veytia se enfrente a la justicia estadounidense, en un proceso que se prevé dure un par de semanas. Está acusado de asociación delictiva para importar y distribuir cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana en EU entre enero de 2013 —fecha en la que asumió el cargo de fiscal General de Nayarit— hasta el pasado mes de febrero. De ser declarado culpable, enfrentaría una condena de entre 10 años y cadena perpetua.