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En pasadas administraciones hubo una "estrategia perversa" para "devastar" el sistema de educación pública en el país, advierte el Plan Nacional de Desarrollo .
En el documento que el martes entregó el Poder Ejecutivo a la Cámara de Diputados, se advierte que la reforma educativa tuvo el propósito de privatizar la educación pública .
El documento de 72 páginas destaca una ofensiva "brutal" en contra de la escuelas normales rurales y se operó una reforma educativa, "que era en realidad una contrarreforma laboral, contraria a los derechos laborales del magisterio y orientada a crear las condiciones para la privatización generalizada de la enseñanza".
Señala que la enseñanza de educación básica y media superior fue vista, "como oportunidades de ingreso para venderle al gobierno insumos educativos inservibles y a precios alzados".
“Esta estrategia perversa se tradujo en la degradación de la calidad de la enseñanza en los niveles básico, medio y medio superior y en la exclusión de cientos de miles de jóvenes de las universidades. En los hechos, el derecho constitucional a la educación resultó severamente mutilado”.
Se destaca que el gobierno federal se comprometió desde el inicio a mejorar las condiciones materiales de las escuelas del país, y a garantizar el acceso de todos los jóvenes a la educación.
Destaca la creación del sistema de Universidades para el Bienestar Benito Juárez García, las cuales iniciaron sus actividades en marzo de 2019 con cien planteles en 31 estados del país. Destaca que dichas universidades se instalaron en zonas altamente pobladas donde no hay oferta de estudios universitarios y que tienen, “alto grado de rezago social, marginación y violencia”.
Hay 11 planteles en Oaxaca, 10 en la Ciudad de México, 8 en Veracruz, 6 en Guanajuato y Chiapas; mientras que el resto de las entidades tienen entre 2 y 5 escuelas.
“En conjunto las universidades para el bienestar ofrecen 32 mil plazas para estudiantes, los cuales recibirán una beca de 2 mil 400 pesos mensuales. Los edificios permanentes en que operarán las universidades serán construidos con trabajo comunitario y de trabajadores locales, en terrenos donados o entregados en comodato por campesinos, municipios o comisarios ejidales”.
Destaca la entrega de dos programas: el Nacional de Becas para el Bienestar Benito Juárez, que contempla la entrega de apoyos a niños y adolescentes menores de 18 años en pobreza extrema que estudien en escuelas públicas. El apoyo es de 800 pesos mensuales, será entregado de manera bimestral, limitado a una beca por familia.
En el caso del programa Jóvenes Escribiendo el Futuro está dirigido a jóvenes menores de 29 años inscritos en universidades públicas, que vivan en un lugar en situación de pobreza y que no reciban ningún otro apoyo del gobierno federal.
En una primera etapa se aplicará a alumnos inscritos en escuelas normales, universidades interculturales, la Universidad Nacional Agraria, Universidad de Chapingo y el sistema de universidades Benito Juárez. El límite máximo de entrega de la beca es el número de años previsto en el plan de estudios.
“Se dará prioridad a hombres y mujeres indígenas y afrodescendientes, a personas que vivan en una zona de atención prioritaria y a personas que vivan en contextos de violencia. A cada becario se dará un apoyo de 4 mil 800 pesos bimestrales durante el ciclo escolar (…) Los becarios podrán inscribirse anualmente en tanto concluyen su educación superior”.
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