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Es necesario que las universidades asuman compromisos "de ida y vuelta" al momento de requerir mayores presupuestos e ingresos del gobierno federal, y que deje de haber "derroches, privilegios y dispendios", pidió el presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados Alfonso Ramírez Cuéllar. Las universidades respondieron: los compromisos están hechos.
El legislador pidió que al mismo tiempo que las universidades públicas demandan que exista suficiencia presupuestal para la educación superior gratuita y obligatoria, que las instituciones hicieran un compromiso para que con metas, procedimientos, fiscalizaciones y resultados se demuestre “que las universidades públicas tienen viabilidad”.
“Que después de esta reunión, pudiéramos suscribir una carta compromiso. El gasto, quizá, no se ejerce de la mejor manera; seguimos teniendo serias deformaciones en la forma como gastamos, quizá hay dispendios en la forma y en el método como llevamos a cabo el ejercicio presupuestal año con año. También posiblemente haya derroches, quizá algunos privilegios, poca fiscalización”, reclamó.
Reconoció que algunas de las universidades iniciaron el proceso para solucionar las dificultades en materia de jubilaciones y pensiones, hacer más eficiente su gasto y resolver sus déficits estructurales, lamentó que el presupuesto para 2020 se mantiene en la misma caída inercial que no permite una mayor inversión en infraestructura y que habrá menores niveles de gasto.
El dinero, dijo, se necesita para construir más escuelas, tener más laboratorios, arreglar los planteles y tener espacios para recibir a los miles de jóvenes que en la actualidad no tienen acceso a la educación superior, "pero que con esta reforma tendrán la oportunidad porque es obligación del Estado".
Ante el reclamo del legislador, el secretario general ejecutivo de la ANUIES, Jaime Valls Esponda reiteró la solicitud de incremento presupuestal y destacó la importancia de crear el fondo especial de gratuidad mandatado en la Constitución.
Las universidades, dijo, han ampliado su matrícula y mejorado la calidad de sus servicios educativos; sin embargo, la incertidumbre presupuestal se refleja en una desaceleración del crecimiento.
“Hay compromiso por parte de las universidades, ahí están los datos y los números. Las universidades son las instituciones con mayor prestigio en la sociedad en los últimos días. Queremos que haya una transformación real en la educación superior. Ya hay una serie de compromisos que hacen los rectores en materia de racionalidad del gasto, transparencia y ser más eficientes”, dijo en entrevista posterior.
Desde septiembre pasado, rectores y directores de Universidades Públicas Estatales pidieron a los diputados de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, recursos por 17 mil 230 millones de pesos para el fondo de gratuidad e incrementos al presupuesto ordinario y fondos extraordinarios.
Expresaron su preocupación porque el presupuesto no ha crecido al mismo ritmo que la matrícula y porque desaparecieron los fondos para atender a las universidades que se encuentran en crisis financiera.
Ayer se llevó a cabo el primer Encuentro Nacional para el Fortalecimiento de la Educación Superior en la que participaron diputados, senadores, rectores y directores de universidades públicas del país, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Auditoría Superior de la Federación, representantes de sindicatos universitarios y secretarios de Educación de los estados para discutir el financiamiento de la educación superior en el país.
En el encuentro los rectores reunidos para encontrar solución duradera a la crisis de las instituciones, dijeron que las universidades ya suscribieron sus acuerdos concretos y que mantienen su solicitud de mayor presupuesto así como de crear un fondo especial para garantizar la gratuidad de la educación superior, consideración que no se incluyó en el Proyecto de Presupuesto de Egresos 2020.
También se buscará resolver la atención de los problemas estructurales de las universidades en crisis financiera , estrategias para lograr que la educación superior sea gratuita y obligatoria, así como ampliar la cobertura, mejorar la transparencia de las instituciones y analizar la situación de las escuelas normales.
En las mesas de trabajo se abordarán la obligatoriedad y gratuidad de la educación superior, transformación de las Instituciones de Educación Superior para fortalecer su contribución al desarrollo local, regional y nacional; atención a problemas estructurales de las IES; hacia una política de financiamiento para la educación superior con visión de Estado.
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