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El coordinador de la bancada del PAN en la Cámara de Diputados, Juan Carlos Romero Hicks , adelantó que si se requiere construir un bloque opositor para frenar la reforma educativa que envió el presidente, Andrés Manuel López Obrador , lo van a hacer.
“Nosotros vamos a hacer lo correcto para México y sí eso requiere hacer la suma de contrapeso como ya lo hicimos la semana antepasada porque no había voluntad para construir, lo vamos a hacer”
, dijo en entrevista.
Además, criticó la ligereza con la que hicieron la iniciativa, en la que por un error eliminaron la autonomía universitaria. “Un error de novato, inadmisible, borran de un plumazo la autonomía universitaria, no es un asunto menor, es un descuido monumental” .
El panista criticó la desaparición el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), pues ve un intento sistemático del Presidente de la República de desmantelar todo lo que le incomoda.
“Yo rechazo el antifederalismo, rechazo la opacidad, rechazo el clientelismo sindical, rechazo la desaparición de órganos autónomos de Estado, el INEE no fue invitado aquí el 1° de diciembre, el Acceso a la Información tampoco, los reguladores de energía tampoco vinieron, Telecomunicaciones tampoco, parece ser un intento sistemático del
Presidente de la República de desmantelar todo lo que le incomoda”
, dijo Romero Hicks.
Dijo que van a analizar cada uno de los temas por sus méritos y la reforma que propuso el titular del Ejecutivo tiene algunas luces y muchas sombras.
Por ejemplo, en luces, reconoce el interés superior de la niñez, reconoce la necesidad de hacer un mejor trabajo en la educación normal y en la formación de los maestros, reconoce que hay que tener una formación continua desde la formación inicial, hasta tener la formación todo el tiempo de los maestros, reconoce que hay diferencias regionales, en eso hay coincidencia.
Y sobran muchas: primero no asume la rectoría del Estado en materia educativa, se corre el riesgo de entregar la educación pública a estructuras clientelares y corruptas y algunas con partes sindicales; tercero, no tienen ni un gramo de federalismo, todo lo ve como una República central y lo siguiente le quita a los maestros y padres de familia la posibilidad de contribuir en el diseño de los planes de estudio y finalmente el contrapeso educativo que es la autoridad de evaluación lo quiere desaparecer.