Más Información
Llega Navidad para repartidores; publican en el DOF decreto para derecho a seguro médico, indemnización y utilidades
Se suspende contingencia ambiental en el Valle de México; aún persiste contaminación en algunas zonas
Esto es lo que sabemos sobre la huelga de trabajadores de Starbucks en EU; estas son las condiciones por las que luchan
politica@eluniversal.com.mx
La disminución en los índices de popularidad del presidente Enrique Peña Nieto, ante escándalos de corrupción, pueden favorecer la victoria en 2018 de Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional de Morena, quien encabeza las encuestas, dijo la calificadora Moody’s.
“El presidente Enrique Peña Nieto, del PRI, ha visto disminuir sus índices de aprobación debido en parte a acusaciones de corrupción. La impopularidad del Presidente puede influir en las perspectivas electorales del tricolor el próximo año. Esto último aumenta la probabilidad de una victoria del candidato (sic) Andrés Manuel López Obrador, de Morena, quien lidera las encuestas”, valoró la agencia.
Con este análisis, Moody’s se une a otras calificadoras que han advertido sobre los riesgos políticos que representan las elecciones del año próximo. Apenas la semana pasada, Standard and Poor’s advirtió que, sin importar quién resulte ganador, tendrá poco margen de maniobra para aplicar medidas que favorezcan el crecimiento económico de México y mejoren sus índices de deuda.
Fitch Ratings consideró en junio que un cambio de políticas de libre mercado podría pesar sobre la calificación crediticia el año próximo.
En un análisis sobre el riesgo político en América Latina, Moody’s reiteró su perspectiva sobre una eventual victoria de López Obrador en 2018, al considerar que su gobierno no revertiría las reformas aprobadas en esta administración, pero podría retrasar inversiones en petróleo.
“A pesar de que es poco probable que una presidencia de López Obrador pueda revertir las reformas, ya que carecería de suficientes votos en el Congreso para hacerlo, su administración podría demorar la implementación de las reformas en curso, particularmente en el sector petrolero”, detalló Moody’s.
Más riesgos. La agencia consideró que las elecciones presidenciales de 2018 y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte representan los mayores riesgos políticos para México, donde una campaña electoral competida puede estancar la agenda de reformas.
“Es improbable que las renegociaciones del TLCAN con Estados Unidos afecten las perspectivas comerciales a mediano plazo”, informó.
La firma explicó que la composición del Congreso tendrá un efecto importante en la capacidad del próximo gobierno para su agenda económica.
“Igual que con las legislaturas anteriores, esperamos que ningún partido tenga mayoría, con escaños divididos entre el PRI gobernante, el PAN y los partidos izquierdistas PRD y Morena. El tricolor contó con el apoyo de AN para impulsar el programa de reformas, incluida la energética, que abrió el sector petrolero a la inversión privada”, añadió la calificadora.
Sobre la renegociación del TLCAN, Moody’s expresó que se esperan reglas de origen más estrictas, dejando el núcleo del tratado prácticamente intacto. “Hasta la fecha, no hay indicios de que las negociaciones puedan conducir a mayores aranceles o restricciones comerciales cuantitativas, como se pensaba inicialmente.
“Los inversores nacionales y extranjeros han reaccionado favorablemente a las indicaciones de cambios limitados, ayudando a apoyar el sentimiento positivo de los inversionistas. Las negociaciones comerciales, que tendrán lugar a principios de 2018, podrían convertirse en un tema contencioso en la campaña electoral del próximo año”, añadió.
El riesgo político en toda América Latina, refirió, es un importante desafío para los emisores de la región, ya que potencialmente puede representar una amenaza para el crecimiento económico, las reformas políticas y las condiciones financieras.
Según la agencia, los países con niveles medianos o elevados de susceptibilidad a eventos de riesgo político incluyen a Venezuela y Argentina. En contraste, el riesgo político es comparativamente más moderado en Brasil, Colombia, Perú, México y Chile.
El caso Odebrecht, informó, demuestra debilidades institucionales en países de la región. “Como resultado de dicho escándalo generalizado, varios proyectos de infraestructura han sido cancelados o demorados, afectando adversamente no sólo a las entidades directamente involucradas, sino también a las condiciones económicas generales”, destacó.