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Al anunciar que este fin de semana se reúne con empresas petroleras en Villahermosa, Tabasco, Andrés Manuel López Obrador dijo que a principios de diciembre —ya como presidente— lanzará licitaciones para perforar pozos y que el programa emergente de rescate a la industria petrolera tendrá un presupuesto adicional de 75 mil millones de pesos.

En conferencia de prensa en la casa de transición adelantó que al inicio del nuevo gobierno se va a licitar la nueva refinería para poder levantar la producción petrolera en poco tiempo e intervenir para extraer petróleo.

Rocío Nahle, próxima titular de la Secretaría de Energía (Sener), detalló que la reforma habla de asignaciones directas o licitaciones que puede hacer la dependencia que estará a su cargo de pozos que tiene abandonados Petróleos Mexicanos (Pemex).

En el acto, el presidente electo presentó a los futuros subsecretarios de Minería, Francisco Quiroga; de Industria y Comercio, Ernesto Acevedo Fernández, y de Comercio Exterior, Luz María de la Mora.

El equipo que está comandado por la próxima secretaria de Economía, Graciela Márquez, va a impulsar tres proyectos prioritarios: la zona libre en la frontera, la minería y las pequeñas y medianas empresas (Pymes).

Destacó que en cuanto a la minería, del impuesto que se aplica a empresas para la extracción de minerales, el 100% será destinado a las comunidades dedicadas a esta labor para mitigar el impacto ambiental. Hoy, 80% de ese impuesto se destina a esos municipios y 20% va a Hacienda.

Para las Pymes, López Obrador anunció que se van a bajar tasas de interés y se otorgarán 700 mil créditos a esos empresarios.

Márquez Colín detalló que mitigar efectos ambientales en las obras mineras de 24 estados, la homologación de salarios y la disminución de impuestos en la frontera norte, así como otorgar microcréditos a Pymes en zonas de alta marginación para detonar empleo y atender a poblaciones excluidas de acceso a crédito, serán tres de los proyectos prioritarios.

Cuestionado sobre las declaraciones de tres asociaciones de ingenieros que aseguran que construir el aeropuerto es más factible en el Lago de Texcoco que en la Base Aérea de Santa Lucía, declaró que aún falta por escuchar a los empresarios y a las organizaciones sociales.

“Corazoncitos”. Luego de la polémica por llamar “corazoncitos” a las reporteras (miércoles), López Obrador aclaró que no tuvo la intención de un lenguaje sexista, sino que lo dijo con cariño: “Tengo una visión distinta, no tiene esa intención [sexista]. Son ustedes mis corazones, mis corazoncitos, yo les estimo mucho, les quiero, yo llevo a la práctica el principio filosófico del amor al prójimo, amor y paz”, insistió y aclaró que seguirá tratando con cariño a la prensa.

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