El Instituto Nacional Electoral (INE) tendrá en 2020 “un potencial riesgo presupuestal, pero no recortará personal ni programas prioritarios, eso sería cortarnos las manos porque no podríamos brindar los servicios ni organizar las elecciones […] Sería condenar las elecciones de 2021 al fracaso y eso no lo vamos a hacer”, advirtió el consejero presidente del organismo, Lorenzo Córdova Vianello.
El INE decidió ayer los tres primeros ajustes para enfrentar el megarrecorte de mil 71 millones de pesos a su presupuesto del próximo año, el cual fue decretado por la Cámara de Diputados.
El organismo suspendió dos proyectos de inversión para 2020 y aplazará hasta donde sea posible decisiones en torno a la organización de la elección federal 2021.
Los programas cancelados son: no renovar la infraestructura informática para el monitoreo de radio y televisión —equipo que caducará en breve— y suspender la inversión en la infraestructura física para mejorar los módulos de atención ciudadana.
La tercera decisión será “revisar los calendarios para el proceso electoral y posponer hasta el límite decisiones y acciones que ordena la ley”, como la instalación de 32 consejos locales, que a su vez designan a los 300 distritales, lo que se aplazará para generar el mayor ahorro posible.
El INE hizo ayer un pronunciamiento sobre el recorte, apoyado por 10 de 11 consejeros, pues no lo suscribió José Roberto Ruiz; además, Córdova adelantó que el 11 de diciembre se realizarán las adecuaciones al gasto.
La consejera Pamela San Martín dejó entrever que probablemente el INE tendrá que acudir nuevamente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para presentar una controversia constitucional en defensa de su presupuesto 2020.
Córdova dijo que el límite crítico en el que está el INE en materia presupuestal lo obligará a revisar algunos convenios de colaboración por los que el organismo da servicios gratuitos a varias dependencias del gobierno. Por ejemplo, el que le ahorra millones de pesos al año a Gobernación y que tendrá que ser revalorado, pues los términos han cambiado.
Los consejeros Córdova Vianello, Ciro Murayama y Benito Nacif descartaron el planteamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien consideró que el recorte del INE podría ser subsanado si los partidos reducen su financiamiento para destinarlo al organismo autónomo.
“No podemos vivir de su favor”, dijo Murayama, pues para operar el INE, comentó, no puede depender de lo que quieran dar las fuerzas políticas a las que fiscaliza.
