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Al rendir protesta como encargada de la dirigencia nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu advirtió que para cambiar el fondo priísta se debe empezar por modificar las formas.
En su primer discurso como presidenta interina del Revolucionario Institucional, Ruiz Massieu puntualizó que el partido no debe darse reglas que al final no se van a cumplir.
“Porque para hacer cambios de fondo también hay que cambiar las formas y, como yo lo interpreto, una de las cosas que más rechaza la gente es la falta de claridad, la falta de contundencia, para decir las cosas como son, empezando por nuestras fallas“, subrayó.
En el acto en el que Rubén Moreira rindió protesta como secretario general del partido, Ruiz Massieu aseveró que los resultados del 1 de julio pasado no se pueden cambiar, pero sí decidir cómo responder a la nueva realidad.
Claudia Ruiz Massieu sustituye a René Juárez Cisneros, quien renunció a la dirigencia el pasado lunes.
Ante la Comisión Política Permanente, la ex funcionaria federal pidió voltear a ver a la militancia, toda vez que es ésta la que mantiene en pie al partido.
“Son las bases quienes nos mantienen en pie, incluso en nuestros momentos más desfavorables, y es sólo regresando a ellas que podremos levantarnos, reinventarnos y crear el nuevo consenso interno que nos permita recuperar la confianza de los mexicanos”, dijo.
Con 83 consejeros presentes, Ruiz Massieu pidió al priísmo mirarse al espejo de cuerpo entero, sin miedos, reconociendo lo que hoy representa el instituto político, para poder definir lo que quiere ser.
Autodescrita como una priísta de resistencia, la encargada de la dirigencia tricolor llamó a concluir el proceso de diagnóstico que hace el partido sobre las causas de su derrota, concluyendo en un análisis: las razones que apartaron al Revolucionario Institucional de la ciudadanía tienen sus orígenes en inercias, actitudes y formas de hacer política que arrastran no desde la pasada elección, sino desde la pasada generación.
Ruiz Massieu prometió que en la toma de decisiones internas del PRI la militancia será un actor central, no sólo ejecutando directrices trazadas por la dirigencia, sino contribuyendo activamente a la toma de decisiones.
Dijo que su trabajo se concentrará, primero, en poner orden interno, en las estructuras, en las dirigencias, en el acatamiento de su normatividad.
