Las condiciones macroeconómicas del país salvaguardan los ahorros y ofrecen espacios para la inversión, destacó el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ( SHCP ), José Antonio González Anaya. Durante su comparecencia ante el pleno de la Cámara de Diputados , con motivo de la Glosa del VI Informe de Gobierno , expuso: “Hoy nuestra estabilidad está anclada en políticas fiscales responsables y en cada decisión de la actual administración siempre estuvo presente el compromiso de preservar la estabilidad”.
Reiteró que la administración que tomará los rumbos del país a partir del 1 de diciembre heredará una economía resiliente y en crecimiento, y que ha reaccionado en forma correcta ante los choques que han llegado del exterior y que tiene su estabilidad bien cimentada en finanzas públicas sanas.
El funcionario federal reconoció el trabajo conjunto entre el Poder Ejecutivo y el Congreso de la Unión para aprobar las reformas estructurales que hoy permiten un crecimiento promedio del Producto Interno Bruto (PIB) de 2.5 por ciento y un aumento del empleo formal a una velocidad de 4.0 por ciento.
La reforma energética, “la primera que me tocó vivir de cerca”, ha detonado proyectos de inversión por 200 mil millones de dólares; la de telecomunicaciones permitió una reducción a la mitad de las tarifas de telefonía celular; y la reforma financiera permitió incorporar anualmente a cuatro millones de adultos al sistema financiero, destacó.
Dijo que los cambios legales para promover la inversión explican una parte de la estrategia para evitar una recesión y el estancamiento. El segundo factor que explica la estabilidad es un buen manejo macroeconómico y un anclaje basado en políticas fiscales responsables.
“Nos comprometimos a realizar un proceso gradual de consolidación fiscal que no afectara la estabilidad o comprometiera el presupuesto destinado a combatir la pobreza”.
Así, enfatizó, México es de los pocos países del Grupo de los 20 ( G20 ) y de América Latina en alcanzar un superávit primario y lograr una reducción de la deuda como porcentaje del PIB, esto se logró a partir de una reforma fiscal que diversificó la fuente de ingresos, haciendo menos vulnerable a la economía por la baja en los precios internacionales del petróleo.
Precisó que una parte importante fueron los ajustes en el gasto público y sólo en 2016 el gobierno federal recortó 160 mil millones de pesos.
En este y en otros casos siempre se protegió el gasto social, para que ningún beneficiario se viera afectado, enfocando los recursos a disminuir la pobreza, señaló ante los legisladores.
jno