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A menos de 100 días de concluir su mandato, el presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que su gobierno no llegó para administrar lo que se tenía, sino para impulsar la transformación del país, por lo que, afirmó, dejará un México mejor al que recibió en 2012. “Reconociendo los esfuerzos de las generaciones que nos antecedieron, no importando su origen partidario.
“Aquí no caben mezquindades ni regateos. Es de justicia reconocer los esfuerzos de cada gobierno, como los que deseamos tenga la futura administración, que sea de prosperidad y éxito porque, entonces, significará desarrollo y bienestar para todo el país”, dijo.
En el marco de la toma de protesta de la nueva dirigencia de la Confederación Nacional Campesina (CNC) —que encabezará el duranguense Ismael Hernández Deras—, el Presidente de la República dijo: “Este gobierno, el que me ha tocado presidir, le ha cumplido a México”.
El Jefe del Ejecutivo dijo que para lograr su misión fue necesario tender puentes de diálogo y entendimiento con diferentes expresiones políticas, que permitieran establecer una agenda sobre los cambios estructurales que el país necesitaba, que claramente estaban diagnosticados, pero que se habían pospuesto por al menos un par de décadas.
“Y arribamos asumiendo el costo que esto pudiera significar, pero siempre pensando en el bienestar de México y en las oportunidades que deparan o deparen a los mexicanos”, señaló en la Casa del Agrarista.
Acompañado por seis secretarios de Estado, los gobernadores de Jalisco, Yucatán y San Luis Potosí, la presidenta nacional del PRI, Claudia Ruiz Massieu, y cuadros del tricolor como Emilio Gamboa, Miguel Ángel Osorio Chong y René Juárez Cisneros, el presidente Peña Nieto tomó protesta a Hernández Deras.
Ahí, Peña Nieto enumeró las acciones que su gobierno ha emprendido para apuntalar al campo nacional “en apoyo a la actividad productiva”.