El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, consideró que existe una confusión sobre el estatus de la Iniciativa Mérida, la cual tiene 13 años de implementación.
En conferencia, el diplomático subrayó que la iniciativa, que fue aprobada durante el sexenio de Felipe Calderón, representa un programa de apoyo a la estrategia de seguridad del gobierno de México.
“La estrategia de Calderón fue muy distinta a la estrategia de [Andrés Manuel] López Obrador, por eso la iniciativa ha evolucionado y cambiado. Creo que todavía hay gente que tiene una visión de la Iniciativa Mérida como la de los primeros años, que tenía que ver con equipo para uso casi tipo militar, pero ya no ha sido así”.
Landau expuso que hoy la iniciativa consiste casi totalmente en apoyar programas para la implementación del nuevo sistema penal en México y se donan equipos a los gobiernos de los estados, para temas forenses.
“A veces escucho a personas diciendo que la Iniciativa Mérida representa una estrategia fallida de combate al narcotráfico. Es gente que realmente no entiende en qué consiste hoy en día. A lo mejor sería cambiar el nombre, porque a lo mejor se asocia demasiado con una estrategia del pasado”, aseveró.
Armas
Landau también habló sobre la necesidad de controlar el tráfico de armas, lo que, dijo, es una de las prioridades de Estados Unidos y México.
Estados Unidos ofreció a México la donación de equipo no intrusivo (tecnología) para controlar el tráfico de armamentos, pero el gobierno mexicano no la ha aceptado, aseguró.
“Es imprescindible que hagamos más esfuerzos compartidos. Hemos ofrecido donar al gobierno de México equipos no intrusivos, para controlar el tráfico de armas, y no se ha aceptado. Creo que hay más que se puede hacer en ambos lados de la frontera, pero creo que para mucha gente en México este punto de las armas es solamente una cosa que se hace para regañar a Estados Unidos”, indicó.
Al referirse a la detención del general Salvador Cienfuegos, extitular de la Defensa Nacional, lamentó que no haya existido confianza y colaboración para que las dos naciones tuvieran conocimiento de lo que ocurría.
“Ambos países somos grandes y tenemos gobiernos grandes , con muchos componentes distintos que a veces no se comunican como lo deberían hacer entre sí, y francamente ese fue el caso aquí”, mencionó.
Existen importantes temas de investigación con componentes muy sensibles, añadió, pero se debe seguir avanzando en el entendimiento para evitar sorpresas en el futuro.
Lo importante, añadió, es no perder de vista que la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico debe seguir.
