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Francisco Javier García Cabeza de Vaca llegó después de la una de la tarde a la Cámara de Diputados. Quería iniciar ahí mismo su defensa ante la Fiscalía General de la República, pero se fue con las manos vacías; en San Lázaro no estaba el expediente en el que es acusado de delincuencia organizada, lavado y defraudación fiscal.
En San Lázaro, el tamaulipeco prácticamente rompió con el presidente Andrés Manuel López Obrador, con quien nunca tuvo una buena relación, y acusó que había una persecución en su contra ordenada desde Palacio Nacional.
Tras dar un mensaje en Tamaulipas, el gobernador viajó en avión a Toluca y de ahí se tras-ladó en camioneta a la Cámara Baja con dos objetivos: que le notificaran de la denuncia en su contra, y que le dieran una copia de la carpeta de investigación que la FGR presentó en su contra y por la que pretende retirarle la inmunidad procesal.
Sin embargo, se fue con las manos vacías, pues la secretaria General de la Cámara de Diputados, Graciela Báez, dijo que no cuenta con la querella y que probablemente hasta este fin de semana tendrán acceso a ella.
García Cabeza de Vaca fue recibido en el Palacio Legislativo por el coordinador del PAN, Juan Carlos Romero Hicks y por algunos diputados. Caminó seguro, flanqueado por la cúpula panista, sin quitarse el cubreboca, hacia la oficina de la Secretaría General de la Cámara de Diputados, para exigir conocer de qué se le acusaba. Sin dar declaraciones, duro, serio, seco.
Después, al exponerse a los reflectores de la prensa, fue directo, habló menos de tres minutos desde un atril y, con un semblante molesto, reclamó que no le permitan conocer los documentos con los que se le denunció y solicitó su desafuero.
Arropado por el coordinador del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, de su hermano el senador Ismael García Cabeza de Vaca y los diputados de Tamaulipas, el gobernador Francisco Javier colocó las palmas de las manos sobre el atril y sin titubeos dijo que quería ser muy claro y a pesar de que nunca se quitó el cubrebocas, apretó la quijada para acusar una persecución política desde Palacio Nacional y enlistó cada uno de los motivos.