Más Información
ruben.migueles@eluniversal.com.mx
Durante el primer trimestre del año el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dejó de ejercer recursos por 20 mil 96 millones de pesos, como parte de la política de contención, reorientación y recalendarización de su presupuesto, así como del replanteamiento de proyectos de obra pública.
Germán Martínez, exdirector general del IMSS, advirtió al presentar su renuncia que uno de los principales problemas que enfrenta la institución durante el actual gobierno es la contención de su gasto en el marco de una política de austeridad y ahorro, lo que limita los servicios que ofrece.
El presupuesto ejercido por el IMSS en los primeros tres meses del año ascendió a 147 mil 568 millones de pesos, cifra 12% inferior a los 167 mil millones presupuestados inicialmente para dicho periodo, es decir, 20 mil 96 millones menos que lo programado, de acuerdo con los datos del anexo estadístico del Informe Trimestral de las Finanzas Públicas presentado por Hacienda.
Sin embargo, de los 167 mil millones de pesos presupuestados inicialmente, 11 mil 434 millones fueron reorientados por las autoridades hacendarias, de manera que los recursos se ubicaron en 156 mil millones de pesos.
De acuerdo con el Informe de la Situación Presupuestaria del IMSS al primer trimestre de 2019, elaborado por el instituto, el subejercicio se ubicó en 8 mil 663 millones de pesos.
El IMSS advierte en el texto que “los recursos no ejercidos en el primer trimestre de 2019 se explican por la recalendarización del presupuesto en diversos capítulos de gasto y un aprovisionamiento con base en el presupuesto devengado desde la perspectiva contable y no necesariamente como flujo de efectivo, como es el caso de los recursos destinados a la compra de materiales y suministros y la contratación de los servicios generales.
“En cuanto a los recursos no ejercidos en el primer trimestre de inversión física, en particular los relacionados con obra pública, conforme a lo registrado como calendario del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), responden principalmente a la necesidad de replantear los proyectos originalmente establecidos en el Programa de Emergencia por Sismos de 2017, dando como resultado la creación del Programa de Continuidad de Servicios Médicos, en el que se colocará a la prestación de los servicios médicos y la atención a los derechohabientes como centro del programa con una visión integral”, detalla el informe.
El rubro en el que se detecta un mayor subejercicio es el relacionado con los servicios generales, cuyo monto erogado fue de 2 mil 665 millones de pesos, cifra 38.2% menor a los 6 mil 971 millones previstos, considerando las modificaciones presupuestales. Por su parte, el gasto destinado a pensiones y jubilaciones sumó 98 mil 661 millones de pesos en los primeros tres meses del año, mil 137 millones menos respecto a los 99 mil 798 millones de pesos programados inicialmente.
Otros rubros que registraron un gasto menor fueron materiales y suministros, con un subejercicio de 500 millones; servicios personales, con 262 millones, así como obra pública, con 166 millones, todo lo cual incidió de una u otra forma en la operación del IMSS en los primeros meses del presente sexenio.
Por el lado de los ingresos, éstos sumaron 210 mil 290 millones de pesos en el periodo señalado, cifra 0.5% superior al presupuesto modificado. Los ingresos propios del IMSS ascendieron a 115 mil 450 millones, monto 2.5% mayor al programado, gracias al mejor desempeño de las cuotas obrero-patronales y a los ingresos financieros de las reservas.
