Más Información
Videojuegos, el nuevo gancho del crimen para captar menores; los atraen con promesas de dinero y poder
Óscar Rentería Schazarino, ha operado contra CJNG, Viagras y Templarios; es el nuevo secretario de Seguridad en Sinaloa
Concentrar información sobre la contaminación atmosférica , recursos hídricos , eventos extremos y efectos del cambio climático en la fauna, flora y humanos, que es generada y compartida en acceso abierto por la Red Universitaria de Observatorios Atmosféricos ( RUOA ), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), es una iniciativa que investigadores universitarios han puesto en marcha como herramienta para elevar el rigor en las investigaciones.
Expertos en ciencias de la atmósfera, biología, geografía y arquitectura, pero también estudiantes que realizan sus proyectos con diversas aplicaciones, son los usuarios frecuentes, señaló Michel Grutter de la Mora, coordinador de la Red e investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA), entidad a la que está adscrita la iniciativa.
Tras aclarar que la RUOA no es una red de monitoreo sino una plataforma de investigación y para la docencia, indicó que se trata del primer programa en México con medición continua de gases de efecto invernadero, lo que se logra con seis instrumentos de muy alta precisión y resolución temporal para conocer las concentraciones ambientales de dióxido de carbono y metano.
“Contamos con un registro de más de cinco años que permite evaluar la relación de su evolución en tiempo, con la influencia humana y los procesos que regulan su concentración como parte del ciclo de carbono”, puntualizó el coordinador.
“En 2014 se puso en marcha este proyecto que ofrece datos inéditos de alto rigor científico, que nutren líneas de investigación, publicaciones y tesis profesionales en esos temas emergentes, que ayudó a impulsar las ciencias atmosféricas entre la comunidad universitaria y el país”, resaltó Grutter.
Michel Grutter agregó que “el propósito es formar alianzas entre personas y grupos de investigación que trabajen en este ámbito. También se pretende dotar a la UNAM y otras universidades de información útil y herramientas para su análisis”.
La Red cuenta con 15 observatorios atmosféricos regionales en el país, algunos en campus de la UNAM, como Juriquilla, Morelia y la Estación Regional del Noroeste, en Hermosillo, mientras que otras están en universidades públicas como las autónomas de Coahuila, Yucatán y Aguascalientes.
etp