La sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, donde se aprobó la realización de un periodo extraordinario de sesiones a realizarse este viernes para únicamente prorrogar la ley en materia de outsourcing y ratificar a dos secretarios de Estado, terminó en una justa de insultos y descalificaciones, primero entre legisladores de Morena y después alcanzó a los panistas.

La decisión de los líderes de Morena en ambas cámaras —Ignacio Mier y Ricardo Monreal— de impulsar un extraordinario sin incluir el desafuero de los diputados Saúl Huerta, acusado de violación sexual de menores, y Mauricio Toledo, investigado por enriquecimiento ilícito, derivó en una batalla verbal entre senadores y diputados guindas.

Poco antes de la zacapela legislativa se aprobó en lo general por 29 votos y cinco en contra el dictamen que señala la realización de un periodo extraordinario de sesiones este viernes e incluye una prórroga por 30 días para la entrada en vigor de la ley de outsourcing y la ratificación de los secretarios de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, y de la Función Pública, Roberto Salcedo.

Con ello, los aliados del PT regresaron a apoyar a Morena ante el dictamen que deja a salvo a su diputado y exdelegado en Coyoacán, Mauricio Toledo. También respaldaron el extraordinario los legisladores del PRI, Movimiento Ciudadano y PRD, mientras la bancada del PAN votó en contra. Todas las reservas panistas para incluir los juicios de procedencia, incluido el fiscal de Morelos, fueron desechados.

La senadora panista Kenia López propuso incluir, además de los tres desafueros, el que en lugar de que la prórroga de la ley del outsourcing sea por 30 días sea hasta el próximo 1 de enero de 2022, porque dijo que en un mes no alcanzará el tiempo para que las empresas puedan acatar la nueva normatividad, por lo que estarán en riesgo 3 millones de empleos. La propuesta fue rechazada.

El debate subía de tono entre Morena y el PAN, pero los agravios entre los seguidores de la 4T estaban pendientes y el senador morenista Alejandro Armenta no tardó mucho en saldar las cuentas desde la más alta tribuna de la nación al aludir al refrán pueblerino “cuando el perro es bravo hasta a los de casa muerde”, en alusión a su correligionario y diputado federal Cayetano García, quien la víspera acusó a Ricardo Monreal de traición por presuntamente negociar y operar para dejar fuera del periodo extraordinario el tema de los desafueros de Saúl Huerta y Mauricio Toledo.

Incluso dio un diagnóstico médico del diputado y calificó de “desliz siquiátrico” lo dicho en la tribuna por Cayetano García, quien confundió a David con Ricardo Monreal.

Recordó a García que hay un documento donde hay un responsable (el coordinador de Morena en San Lázaro, Ignacio Mier) que excluyó el tema de los desafueros en el extraordinario.

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