La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) celebró las siete medidas anunciadas por Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación , que tienen como objetivo de solucionar el problema de los desaparecidos en México.
En el marco Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas , que se conmemora hoy, la CNDH aplaudió que el gobierno federal aceptó la competencia del Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas para recibir y examinar comunicaciones individuales, además de que se anunció que el próximo año el organismo podría visitar nuestro país.
“Este Organismo Nacional saluda que el día de hoy se haya anunciado que el Presidente de la República ha instruido aceptar la competencia del Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas para recibir y examinar comunicaciones individuales, situación que no fue atendida por la administración pasada, a pesar de los diversos exhortos realizados por la CNDH”, señaló la dependencia.
También celebró que el gobierno atenderá las decisiones internacionales relacionadas con casos de desaparición de personas; presentará una iniciativa legislativa que permita hacer efectivo el mecanismo extraordinario de identificación forense, así como el hecho de que la Unidad de Búsqueda de la Policía Federal ayudará a la Comisión Nacional de Búsqueda en sus tareas.
De igual forma expresó su compromiso con las 42 mil personas desaparecidas y su solidaridad con las familias de las víctimas, “quienes aún esperan conocer la verdad sobre esa práctica ignominiosa, contraria a la dignidad humana y que implica la negación absoluta de todos los derechos humanos”.
La CNDH consideró que la falta de respuesta de las autoridades en los casos de desaparición refleja “una actitud indiferente ante el sufrimiento y dolor de las víctimas y sus familiares”, e hizo un llamado para implementar políticas y acciones para disminuir el número de desaparición forzada y cometida por particulares.
Por último, agregó que la sociedad en general debe unirse para combatir este flagelo, de lo contrario no podremos hablar de ser una sociedad sustentada en el reconocimiento y respeto de los derechos humanos.
