A pesar de la reforma educativa y con recursos para la nómina de los maestros, en 2016 la Secretaría de Educación Pública (SEP) destinó 120.7 millones de pesos para hacer “pagos indebidos” de 4 mil 154 plazas de comisionados sindicales y funcionarios de elección popular.
En el caso de comisionados del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), se trató de 13 mil 246 pagos por 86.1 millones de pesos correspondientes a tres mil 701 plazas adscritas a Centros de Trabajo con clave AGS, correspondientes a dos mil 246 trabajadores, reveló la Auditoría Superior de la Federación.
“La doble negociación salarial dejó de ser una carga presupuestal para las entidades federativas y para la Federación, quien aportaba recursos adicionales para el cierre de los ejercicios fiscales”, concluye la auditoría.
En su análisis Pase de lista al Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo 2018 , correspondiente al ramo 33 del presupuesto, el auditor encontró que estos pagos se hicieron en Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Hidalgo, Colima, Durango, Oaxaca, Tlaxcala, Nuevo León, Zacatecas, Chiapas, Morelos, Jalisco, Tamaulipas, Querétaro, Quintana Roo, Michoacán, y Veracruz autorizaron pagos indebidos a centros de trabajo de personal comisionado al sindicato. Mientras que Sonora, Veracruz y Morelos autorizó 258 pagos por dos millones de pesos a 130 trabajadores comisionados al sindicato.
En otros ocho estados, la SEP pagó 32.6 millones de pesos a 138 funcionarios que ocuparon algún cargo de elección popular y contaron con 234 plazas, adscritos a 140 centros de trabajo.
En sus conclusiones, el auditor señala que la centralización del FONE “favorece la transparencia” en el uso de los recursos públicos para pagar la nómina educativa, y que facilita el ordenamiento del gasto mediante el pago centralizado de la nómina correspondiente al personal de educación básica.
“Si bien el proceso de reestructuración educativo es complejo, México por medio del FONE puede alcanzar mejoras en los niveles de transparencia de los recursos destinados a la educación básica, ya que disminuirá la discrecionalidad presentada con el Fondo de Aportaciones a la Educación Básica (FAEB)”, señala.
