En la Estación Migratoria de Saltillo, Coahuila , los migrantes entre los que se cuentan niños y adolescentes no acompañados, duermen entre insectos, permanecen en condiciones insalubres y no reciben atención médica ni información.
Así lo documentó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) , razón por la que recomendo al Comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM) suspender operaciones de la estación hasta que se le realicen adecuaciones o se designe un nuevo inmueble.
El organismo señaló que en la estación persisten condiciones insalubres , trato inadecuado a los migrantes y falta de información sobre su situación migratoria.
“Mediante diversas quejas recabadas por este Organismo Nacional se conoció que en dicho recinto migratorio, además de existir plaga de insectos en los dormitorios y escasez de agua en los sanitarios, no se brinda atención médica adecuada, ni llamadas telefónicas a las personas ahí detenidas”, indicó.
La estación se encuentra en un inmueble construido para un gimnasio, por lo que la CNDH consideró que esta no es la infraestructura adecuada para brindar alojamiento a los migrantes.
El personal no informa a los migrantes sobre el estado de sus Procedimientos Administrativos Migratorios y la CNDH detectó que a 5 de ellos no les entregó los formatos para solicitar el reconocimiento de la condición de refugiado pues les dijeron que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados no concedería la petición.
“Mediante diversas visitas a esa estación migratoria, personal de la CNDH documentó carencia de dormitorios para albergar a personas en situación de vulnerabilidad como personas mayores, niñas, niños y adolescentes, inexistencia de áreas recreativas, extravío de pertenencias que las personas pusieron en resguardo al momento de ingresar, estancias prolongadas de más de 60 días hábiles, omisión de la información sobre la situación migratoria, así como condiciones insalubres que afectaban la salud de los detenidos, lo que motivó que se solicitara la implementación de medidas cautelares”, agregó.
Entre las medidas cautelares que solicitó, la CNDH buscó erradicar la plaga de insectos en los dormitórios que provocó problemas de salud en los menores migrantes, suministrar agua suficiente y reparar los sanitários.
Sin embargo, las medidas del INM fueron insuficientes, lo que vulneró el trato digno y el derecho a la protección de la salud de los migrantes.
Constató que 41 adolescentes no acompañados fueron privados de su libertad en áreas no adecuadas para su desarrollo integral en lugar de que los canalizaran a un albergue con condiciones adecuadas.
Recomendó al Comisionado del INM reparar el daño a las víctimas que identificó, devolverles las pertenencias y el dinero que se les extravió y que estaban bajo el resguardo del Instituto.
También recomendó el traslado de los migrantes a un inmueble con la infraestructura adecuada y supervisar todas las estancias y estaciones migratorias del país para verificar que los migrantes tienen acceso al agua, permanecen en condiciones de higiene, tienen dormitorios adecuados y que se cumplen los estándares nacionales e internacionales para atenderlos, principalmente cuando se trata de menores no acompañados.
lrs