Nueva York.— El abogado del exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, aseguró en documentos judiciales que su cliente no es violento ni tiene conexión con altos mandos del Cártel de Sinaloa, por lo que los miembros del jurado en su juicio por narcotráfico no deberían quedar anónimos ni ser apartados del público.

En 25 páginas ingresadas al sistema electrónico de las cortes federales estadounidenses, el abogado César de Castro señala que un jurado anónimo, escoltado y separado del público daría la impresión de que su cliente es culpable de los cargos que se le imputan y eso no garantiza un juicio justo.

García Luna, quien fue secretario de Seguridad Pública de 2006 a 2012, se ha declarado inocente de cargos que incluyen asociación delictiva para distribuir cocaína, participación en una empresa criminal continua y mentir a las autoridades.

Está acusado de recibir millones de dólares en sobornos por parte del Cártel de Sinaloa, a cambio de que la organización criminal pudiera operar a sus anchas.

Fue arrestado en Estados Unidos, en 2019. De ser declarado culpable, enfrenta una pena máxima de cadena perpetua.

En diciembre pasado, fiscales del Distrito Este de Nueva York pidieron que se proteja la identidad e integridad física de los miembros del jurado, porque el mexicano “tiene recursos para interferir con el proceso judicial” y el caso capta mucha atención mediática.

De Castro respondió que su cliente no tiene dinero, ya que todas sus cuentas están congeladas, por lo que no puede sobornar a ningún integrante del jurado.

Los fiscales dijeron que les preocupa que personas cercanas a García Luna lleven a cabo una campaña de acoso, intimidación y violencia contra testigos en el juicio y sus familias.

El abogado indicó que entre los miles de documentos de pruebas que la fiscalía ha presentado contra su cliente, no hay evidencia de lazos con el Cártel de Sinaloa.

“Ninguna de las acusaciones contra el señor García Luna encaja con factores legales que justifiquen un jurado anónimo. Él no tiene un historial de violencia”, escribió De Castro.

Entre las pruebas, mencionó una grabación que un compañero de celda de García Luna hizo en la cárcel y en la que le hace muchas preguntas. Según el abogado, el preso está desesperado por recibir apoyo a su paquete de fianza, por lo que la grabación debería desestimarse como prueba.

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