Por presuntamente acreditar tortura en su detención, Saúl Solís Solís “El Lince”, quien fuera uno de los lugartenientes de “Los Caballeros Templarios”, en la región de la Tierra Caliente de Michoacán, solicitó a las autoridades federales que le otorguen amnistía o preliberación.
Sin embargo, ante lo que consideró una “dilación excesiva” en la respuesta a su solicitud, el michoacano presentó una demanda de amparo ante el Juzgado Decimotercero de Distrito de Amparo en Materia Penal de la Ciudad de México contra la falta de respuesta de las autoridades, misma que fue desechada porque no precisó los actos reclamados.
Se le pidió aclarar si reclama la omisión de elaborar un proyecto de resolución a su solicitud de amnistía y de dictar resolución, respecto a otorgar su preliberación, pero no lo aclaró en el plazo de cinco días concedido.
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En septiembre de 2011, Saúl Solís Solís fue detenido en la localidad de Nueva Italia, Michoacán, por elementos del Ejército mexicano, y era considerado uno de los principales lugartenientes del grupo delictivo de “Los Caballeros Templarios”.
Según investigaciones ministeriales, “El Lince” era el encargado del control de la siembra y cosecha de enervantes, tráfico de droga y manejo de laboratorios clandestinos, extorsiones, secuestros y homicidios en los municipios de La Huacana, Ario de Rosales, Nuevo Urecho, Tacámbaro y Turicato, Michoacán, así como en el Estado de México.
Del 2003 a 2005, se desempeñó como director de Seguridad Pública del municipio de Turicato, uno de los principales bastiones de “Los Caballeros Templarios”.
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Era primo de Enrique Plancarte Solís, alias “Kike Plancarte”, quien fue abatido por el Ejército en un rancho en el estado de Querétaro.
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