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Tuxtla Gutiérrez, Chis.— Andrés Manuel López Obrador insistirá al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que echen a andar un plan para invertir 30 mil millones de dólares en el desarrollo de los países de Centroamérica y el sureste de México, con la finalidad de frenar la migración ilegal.
Ante el paso de la caravana de centroamericanos que ayer se dirigía a Tapachula, el presidente electo se reunió en privado con el gobernador chiapaneco, Manuel Velasco Coello, a quien pidió que otorgue garantías para alojamiento y protección a las familias de los migrantes.
“Le escribí esta carta al presidente Donald Trump y voy a seguir insistiendo en ese tema porque nos interesa mucho este acuerdo de cooperación para el desarrollo, porque si hay crecimiento económico en países de Centroamérica [Guatemala, Honduras, El Salvador] y el sur-sureste de México no va a haber fenómeno migratorio.
“Vamos a seguir insistiendo en este asunto y también le estoy pidiendo al gobernador de Chiapas que esté muy pendiente para que se proteja a los migrantes, que se les garantice dónde dormir y protección a las familias y niños. Nada de maltrato a los migrantes”, declaró.
En un mitin en el centro histórico de Tuxtla Gutiérrez, López Obrador externó que no quiere que los centroamericanos sufran lo que padecen los mexicanos cuando migran a Estados Unidos.
“Queremos un mundo sin injusticias y con el derecho al trabajo a los hermanos migrantes centroamericanos, decirles que cuentan con nosotros”, insistió.
Dijo que con el plan que propuso al presidente estadounidense, su gobierno está dispuesto a destinar recursos para el desarrollo de Centroamérica.
“Ofrecí visas de trabajo porque va haber trabajo para los mexicanos y centroamericanos en nuestra patria”, afirmó e incluso citó el dicho: “Dónde come uno, comen dos”.
Reunión con Fuerzas Armadas. López Obrador se reunirá, por separado, con los secretarios de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, y de la Marina, Vidal Soberón Sanz.
En entrevista en el avión que lo llevó a una gira a Chiapas, el presidente electo detalló que hoy se reunirá con el titular de la Sedena en las instalaciones de la Defensa Nacional y durante la semana también acudirá a un encuentro con el secretario de Marina.
Ambas reuniones serán reservadas, “ya que es un acuerdo privado y pido que me comprendan porque no les puedo dar la hora”.
También, se comprometió a que antes de que termine octubre va a dar a conocer a los próximos titulares de la Defensa y la Marina.
López Obrador reiteró que el tema de seguridad no se resuelve con medidas coercitivas. Incluso, sin mencionar su nombre, criticó al ex presidente Felipe Calderón por haber “declarado la guerra al narco”.
“Un presidente que declaró la guerra e inició su gobierno, se disfrazó de militar, se puso un chaleco que le quedaba grande, se parecía al comandante Borolas”, refirió.
Asimismo, arremetió en contra de intelectuales, escritores y prensa conservadora a la que califica como fifí, al decirles que ellos fueron los promotores del actual modelo económico que, según él, ha fracasado.
Al explicar que fifí es un término surgido en la revolución maderista, los retó a que hagan una autocrítica de fracasos, por ejemplo, según él, la reforma energética, ya que les atribuye que ellos la avalaron hace cuatro años.
Además, aclaró que siempre señala a sus opositores y a los conservadores, porque “me gusta quitarles la máscara, desnudarlos, aunque se queden nada más en paños menores”.
