De entre las muchas perlas y churrascos declarativos y discursivos que la semana nos dejó, se queda con las de Alberto Ángel Fernández , presidente de la hermana República Argentina, quien en su afán de lucirse ante el antiguo amo colonial se convirtió -diría Mafalda- en un auténtico pichiruchi al afirmar que "escribió alguna vez Octavio Paz que los mexicanos salieron de los indios, los brasileros (sic) salieron de la selva, pero nosotros los argentinos llegamos de los barcos. Y eran barcos que venían de Europa".

Bueno, pues las negociaciones con el FMI por la deuda de 45 mil millones de dólares que le heredó el expresidente Mauricio Macri, a quien los peronistas llaman "el gato", deben estar proyectando una sombra tan ominosa sobre la Casa Rosada como los "fondos buitres", ya que el Ché Fernández, quien se definió como "europeísta", habló así al reunirse en mi Buenos Aires querido con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez , olvidando los abrazos y apapachos que recibió de ya saben quien apenas en febrero, cuando vino como invitado especial en el festejo del bicentenario de la promulgación del Plan de Iguala y del Día de la Bandera.

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

Eso, sin mencionar que la primera gira de Fernández como mandatario electo en 2019 fue precisamente a México, para ratificar sus coincidencias con la 4T sobre todo en eso de acusar a los periodistas de mentir, al igual que sus palabras de alegría en un enlace virtual con la mañanera el 25 de mayo, justo el día de la independencia argentina, al celebrar el acuerdo para producir en conjunto la vacuna de AstraZeneca , "ahí donde se inicia el norte de Latinoamérica y donde termina en el sur América Latina".

Desatado el escándalo -no queremos ni imaginar el regaño que le habrá dado la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner , quien es, dicen, el verdadero poder tras el trono- Ángel Fernández, pero no el gran cronista deportivo, sino el pésimo orador, se disculpó con "quien se haya sentido ofendido o invisibilizado", mientras que sus corifeos se apresuraron a explicar que no citó mal a Paz, sino al músico local Lito Nebbia, quien por cierto lideró al grupo Los Gatos en aquella época en que se escribía "mejicanos" en las letras de sus canciones, muy al estilo ibérico.

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

Claro que con los que verdaderamente se manchó Fernández el justicialista fue con los "brasileros" al atribuirles un origen selvático, ya que los mexicanos no renegamos de nuestras raíces indígenas, lo que llevó a su colega amazónico, Jair Bolsonaro , a expresar que la boluda frase le recordó a Nicolás Maduro , quien "decía que hablaba con pajaritos en los que había encarnado la figura de Chávez. Para ellos no hay vacunas", sentenció. Antes, su hijo y diputado Eduardo recalcó: "El barco que está hundiéndose es el de Argentina ". Es probable que se le hayan cruzado los problemas lingüísticos del portuñol, porque el joven Bolsonaro también podría haberle respondido a Fernández: ¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!".

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

REVÉS ELECTORAL
Necesitan vitacilina, merthiolate, árnica y curitas

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

Ya pasó una semana de las elecciones intermedias y una de las mayores lecciones que nos dieron, por si la habíamos olvidado, es que la participación en las urnas y el voto son los medios que tenemos para cambiar lo que creemos que está mal y no conduce a nuestra sociedad hacia una mejor convivencia y desarrollo. Eso, que parece tan obvio, es la democracia y los mexicanos debemos ejercerla, cuidarla y respetarla.

Por eso resulta tan lamentable que desde los ámbitos más extremistas e intolerantes de la 4T haya quienes en vez de acatar el veredicto del sufragio sigan hablando de "campañas de desprestigio" y hasta de "fraude" para explicarse porque lejos de la gran victoria que esperaban lograr el resultado fue un duro revés con la pérdida de la mayoría de las alcaldías de la Ciudad de México , lo mismo que el avance opositor que les impidió, en buena hora, obtener la mayoría calificada en San Lázaro y el Congreso capitalino.

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

Si Morena tuvo tanto éxito, como efectivamente lo alcanzó, al ganar gubernaturas y retener la mayoría simple en la Cámara de Diputados, ¿por qué se quejan tanto e inventan cosas? Los ciudadanos que no votaron por "el movimiento" no tienen porqué ser insultados y llamados parte de la "malanteada" y de la "delincuencia de cuello blanco" debido al simple hecho de haber ejercido su derecho al voto, de igual forma en que es, digamos... peregrino y absurdo alegar que "los que no viajan en Metro votaron en contra" por una manipulación imaginaria del accidente en la Línea 12 , cuyas investigaciones son frenadas, vaya paradoja, por las propias autoridades federales y locales.

En resumen, hablan de rechazar la polarización pero ellos son, como siempre, los primeros que la promueven siguiendo el manual del buen retropopulista, quizá por el coraje de que en adelante tendrán que negociar. No han entendido nada de los comicios, con excepciones como la de José Carlos Acosta , alcalde que repetiría en Xochimilco y que puso el dedo en la llaga de las broncas internas de Morena, que cada vez se parecen más a las que sufría el PRD. Sí, afirman desde "el muro de pejín", en Morena y la 4T también pululan corrientes, tribus, facciones y disidencias que se están dando hasta con la cubeta. Parafraseando al clásico, ¡que con su pan se lo coman!

FRANCA Y PREOCUPADA
La polémica visita de la presidente Kabala, Tamala ¿o cómo era?

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

En el frente diplomático no sólo tuvimos el yerro del presidente argentino Alberto Fernández, sino también el de ya saben quien al recibir en Palacio Nacional a Kamala Harris , la vicepresidenta de Estados Unidos, quien más allá del gazapo de ser llamada "presidente Kabala" suscribió acuerdos para "tener una América del Norte próspera y segura", mediante el diálogo económico y de seguridad de alto nivel, además, por supuesto, de los esfuerzos conjuntos ante la migración procedente de Centroamérica .

Ya no se escuchó nada del audaz plan lanzado por el sembrador de la democracia para que Washington conceda la ciudadanía estadounidense a cientos de miles de centroamericanos, que en primera instancia entrarían a un programa de trabajo agrícola en sus respectivos países. En su lugar, habría nuevas inversiones por 250 millones de dólares para fortalecer las cadenas de valor rurales como el café, el cacao y el ecoturismo, pero en el sur de México, donde EU también contribuirá a la construcción de entre 40% y 50% de nuevas viviendas, según el comunicado expedido por la oficina de Harris.

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

Dos días después de su gira relámpago, Harris concedió una entrevista a EFE, en la que sostuvo que fue "muy franca" con los mandatarios de México y de Guatemala -país que también visitó- al manifestarles que está "preocupada por la corrupción y la impunidad" en sus respectivas naciones. Les pidió, asimismo, que "dejen hacer su trabajo" sin obstáculos a la prensa y las ONG ; "fui muy directa con cada uno de ellos respecto a esas preocupaciones", subrayó. No obstante, poco más tarde su oficina aclaró que en este último tema sólo se refirió a Guatemala, donde se aprobó una ley que permitirá al Estado restringir la formación de organismos no gubernamentales.

¿Será? Ya ven que el supremo intérprete del pensamiento popular le ha exigido a EU que cese el apoyo para las ONG de México, que considera una "intervención". Por su lado, el canciller Marcelo Ebrard puntualizó que incluso los pronunciamientos de la Casa Blanca al respecto no son "la respuesta" que México sigue esperando. Por ahí comentan, sin embargo, que a buen entendedor, pocas palabras...

¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!
¡Pero Ché Alberto, déjate de decir pavadas!

NUMERALIA

4 mil 800

millones de dólares costó el nuevo tren de alta velocidad que une a Lhasa, capital del Tíbet, con el resto de China.

2 mil 18

kilómetros mide la frontera entre Texas y México. El gobernador texano, Greg Abbott, anunció que reanudará la construcción de un muro en el límite.