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Las irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de la Federación ( ASF ) por más de 21 mil millones de pesos en el manejo de los recursos en 2020 confirman que estamos ante un gobierno más ineficiente, más opaco y más corrupto que los anteriores, señaló el líder del PAN en el Senado, Julen Rementería.
“El presidente no barre la escalera, guarda la mugre debajo del tapete de la impunidad. Aunque diga que se van a aclarar las irregularidades nadie le cree”, dijo, mientras recordó que aún falta por explicar el destino de más de 84 mil 381 millones de pesos de la Cuenta Pública 2019 y presentar las denuncias correspondientes.
El senador hizo un recuento de las irregularidades detectas por la ASF, entre las que destacan las señaladas en los proyectos insignia del presidente: 20 mil 243 millones de pesos en el Aeropuerto Felipe Ángeles, 256 millones en el Tren Maya y 59 millones en Dos Bocas.
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Además, abundó, mil 445 millones en Segalmex, 518 millones en Liconsa, mil 600 millones en Insabi, 800 millones en el ISSSTE, 564 millones en la SEP, 377 millones en la CONADE, 130 millones en la Secretaría del Bienestar, entre otros.
“Con ese monto se habría apoyado a 2.6 millones de familias con cuatro mil pesos durante seis meses durante la actual crisis económica y de salud”, aseguró.
Recordó también que hace un año el presidente presionó a su titular, David Colmenares, para que redujera el costo de la cancelación del Aeropuerto, quien, dijo, lamentable cedió, por lo que cuestionó: ¿qué credibilidad podría tener ahora?
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“Por todo lo anterior, por los actos de corrupción que envuelven a los colaboradores cercanos de López Obrador, sus hermanos Pío y Martín, su prima Felipa, y ahora su hijo José Ramón, es que quieren desaparecer el Sistema Nacional Anticorrupción. La Casa Gris es la gota que derramó el vaso”, sostuvo.
"¿Alguien cree que la Fiscalía General de la República de verdad investigará a la familia del presidente?", insistió.
“Por más que la empresa Baker Hughes diga que no hay conflicto de interés , la realidad es que José Ramón vivió en la lujosa mansión de uno de sus ejecutivos, y a partir de esa fecha han recibido 19 mil millones de pesos en contratos de Pemex. Ahí están los datos, los que se conocen y no se han negado. Lo demás hay que aclararlo y hasta ahora no se ha hecho", apuntó.
Serán las autoridades de Estados Unidos y no los beneficiarios quienes determinen si hay conflicto de interés o no, subrayó, pues no se vale que vengan los investigadores de la propia empresa investigada a tratar de aclarar lo que no tiene ninguna explicación.
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