Tras los resultados de la jornada electoral del pasado domingo 5 de junio en donde la alianza opositora Va por México ganó sólo dos de las seis gubernaturas en juego, Mauricio Kuri González, gobernador de Querétaro, llamó al Partido Acción Nacional (PAN) a reflexionar su alianza con el Partido Revolucionario Institucional (PRI).

En entrevista con medios afuera de Palacio Nacional tras reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador para conversar acerca del proyecto de abasto de agua y desarrollo urbano en la entidad, el gobernador blanquiazul manifestó que dependiendo de las circunstancias se determinará si se conforma la coalición para las elecciones en Coahuila y el Estado de México.

“Yo creo que es un momento de reflexión para todos los partidos, yo coincido en que el Bajío sigue siendo un buen lugar para Acción Nacional, dónde se ganó y dónde se perdió. Yo creo que cada partido tendrá que hacer su propia autorreflexión”, dijo.

“El PAN es el más fuerte de la coalición Va por México, ¿debería tener mano para las candidaturas de Coahuila y del Estado de México?”, se le preguntó.

“Habrá que ver, dependiendo cómo estén las circunstancias y ver cuál es el sentido de si habrá o no habrá, si seguirá o no habiendo alianza”, dijo.

“¿Deberá repensar su alianza con el PRI?”, se le inquirió.

“Yo creo que se debe reflexionar cómo nos fue y a partir de ahí que el propio partido tome sus decisiones”, contestó.

Hay que sacudir dirigencias: Madero

Aparte, el senador del Grupo Plural, exmilitante y crítico del PAN, Gustavo Enrique Madero, expuso a EL UNIVERSAL que ese partido en 2018 gobernaba a 39.5 millones de mexicanos en 12 estados del país y como resultado de los comicios del pasado 5 de junio y con sólo cinco estados sólo serán 16 millones.

“Más dramático es el caso del del PRI, que de gobernar a 55 millones de mexicanos en 2018 pasó en este 2022 a sólo 22 millones, pero si pierde en 2023 los estados de Coahuila y Estado de México tendrá una merma adicional de 17 millones, con lo que podría convertirse en sólo un partido local”, advirtió.

Expuso que la estrategia de Morena y del presidente López Obrador fue absorber al PRD, a sus liderazgos y cuadros, para ahora hacer lo mismo con el PRI, ya que muchos candidatos que ganaron el pasado 5 de junio tuvieron una larga carrera en el tricolor.

“Morena no es el nuevo PRI, es el viejo PRI, lo cual es muy peligroso porque se regresó al populismo, al autoritarismo, a los pactos con el narco y al debilitamiento de pesos y contrapesos”, dijo.

Madero aseguró que de cara a 2023 y 2024 “hay que sacudir a las dirigencias nacionales de los partidos para que salgan de su círculo de autocomplacencia. Tiene que haber algo grande y diferente con candidaturas incuestionables, con perfiles que no tengan vínculos con la corrupción, con la delincuencia, con la violencia de género, para buscar un gobierno de coalición y con un verdadero proyecto social”.

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