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Un juez federal ordenó frenar la construcción de una red de agua potable en San Lorenzo Acopilco que el gobierno de la Ciudad de México anunció como parte de las compensaciones en la alcaldía de Cuajimalpa por la construcción del Tren Interurbano.
El juez decimocuarto de Distrito en Materia Administrativa concedió una suspensión a quienes dijeron ser integrantes del poblado San Lorenzo Acopilco contra el proyecto de infraestructura hidráulica que se ejecutaría en las tierras originarias de esa comunidad.
De acuerdo con la resolución, a la que tuvo acceso EL UNIVERSAL, la medida tendrá vigor hasta que el juez resuelva en definitiva el amparo tramitado contra la obra.
Además, el juez ordenó que para garantizar la preservación de los recursos naturales y la seguridad de los habitantes del pueblo originario, las autoridades capitalinas están facultadas para tomar las medidas necesarias.
“Se decreta la suspensión de oficio y de plano de los actos reclamados para el efecto de que se suspenda la ejecución del proyecto de infraestructura hidráulica que posiblemente ejecutan las autoridades responsables en las tierras originarias de San Lorenzo Acopilco, alcaldía de Cuajimalpa de Morelos, hasta en tanto cause ejecutoria o estado la resolución que se dicte en este juicio de amparo.
“En el caso de que las autoridades responsables ya hubieren realizado algún trabajo de perforación, excavación, construcción o edificación en alguna parte de las tierras o demarcación pertenecientes al pueblo, relacionada con el proyecto que reclama la parte quejosa y surja la estricta necesidad de realizar una obra diversa de mantenimiento, de preservación de la zona afectada, o realizar una tarea o labor de mitigación en el área impactada correspondiente del poblado, entre otros supuestos”, se lee en la resolución.
En el texto se lee que las autoridades responsables están facultadas para llevar a cabo obras de mitigación, preservación o mantenimiento indispensables “quedando obligadas a informar a este juzgado sin demora alguna”.
La obra fue sometida a consulta popular por el gobierno capitalino y la votación favoreció el proyecto, pero los habitantes consideraron que el proceso fue irregular y que el resultado no es legítimo.
De acuerdo con el gobierno de la Ciudad de México, la obra beneficiaría a toda la zona y colonias circunvecinas, debido a que prevé la construcción de un canal de tanque a tanque, que funcionaría sólo en temporada de estiaje y trasladaría agua del Sistema Cutzamala de la línea general.
Es decir, se realizaría una conducción del tanque de Contadero al de Acopilco como parte de las medidas que el gobierno capitalino anunció para mitigar el desabasto del líquido.
La alcaldía ya impugnó la decisión del juez y el asunto fue enviado a un Tribunal Colegiado para que decida si el gobierno capitalino puede continuar los trabajos.