La Oficina para México y Centroamérica, el Comité de Protección a Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), Reporteros Sin Fronteras RSF, Comunicación e Información de la Mujer A.C. (CIMAC) y Propuesta Cívica, condenaron el bloqueo informativo contra la periodista independiente Reyna Haydée Ramírez Hernández, quien cubre las conferencias mañaneras del presidente y ha sido víctima de agresiones digitales.

A través de sus redes sociales acusó “censura” por no dejarla ingresar al Salón Tesorería, donde se realizan las conferencias matutinas.

En un comunicado, las ONG precisaron que la periodista ha sido estigmatizada por López Obrador en múltiples instancias, incentivando reacciones en las redes sociales.

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En las calles ha sido interpelada por particulares y presuntos representantes del gobierno federal, durante y posterior a sus coberturas, inclusive cerca de su domicilio, por lo que preocupa que estos actos pudieran escalar, señalaron las organizaciones civiles.

Un ejemplo de estos hechos ocurrió el 2 de junio, durante su cobertura electoral fue víctima de un bloqueo informativo y de intimidaciones cuando fue rodeada por una decena de personas que le gritaron consignas, insultos y la grabaron.

Presuntos militantes del partido Morena comenzaron a gritarle “indígena” y “chayotera”, y no le permitían cubrir la casilla donde el presidente López Obrador fue a ejercer su voto. En esa ocasión,policías capitalinos la tuvieron que escoltar por su propia seguridad.

Desde 2022, organizaciones de sociedad civil y periodistas han expresado su solidaridad con la periodista por agresiones digitales a las que fue sujeta. Más recientemente, en diciembre de 2023, ARTICLE 19 alertó sobre una campaña de desprestigio en redes sociales posterior a otra participación en la mañanera.

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En la conferencia matutina del 28 de junio, Ramírez participó en la conferencia matutina del Ejecutivo federal, en la que realizó diversas preguntas al presidente Andrés Manuel López Obrador. A lo largo de la sesión tuvo lugar una amplia discusión y cuestionamientos entre la periodista y el primer mandatario del país.

El lunes 1 de julio, personal del Palacio Nacional le negó la entrada a Reyna Haydée. En entrevista con ARTICLE 19, la periodista relató que cuando intentó ingresar al recinto, la persona encargada de dar acceso le dijo que no “no podía pasar”.

Al preguntar la razón de la negativa, le respondió: “Esas instrucciones me dieron”. Momentos después, la periodista se comunicó vía WhatsApp con Jesús Ramírez Cuevas, vocero del Gobierno de la República, para señalar la situación, quien le respondió que le negaba el acceso porque “violaste el reglamento por mucho”, sin especificar la reglamentación ni la duración de la “suspensión”.

Pese a que existen lineamientos públicos con reglas sobre la cantidad de preguntas y duración de las intervenciones, la aplicación de estas normas, y posibles sanciones no están definidas detalladamente, y están sujetas a discreción del personal de la Oficina de Comunicación Social de la Presidencia. Permitiendo que estas pudieran ser aplicadas de manera arbitraria.

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Como respuesta a los cuestionamientos de la periodista, desde ese mismo día sus redes sociales se llenaron de mensajes intimidatorios deslegitimando la labor periodística de Reyna, llamándola “chayotera” y “vendida”, entre otras.

Las organizaciones pudieron documentar que múltiples de estas comunicaciones tienen una connotación de género, haciendo alusiones a su supuesto rol como mujer, e inclusive contienen mensajes discriminatorios.

De acuerdo a la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, la violencia digital en contra de las periodistas mujeres provoca un efecto inhibitorio tanto para ellas de no seguir publicando sobre ciertos temas, como para otras periodistas que temen enfrentar las mismas agresiones. Lo anterior, reduce la perspectiva de las mujeres periodistas y fortalece los sesgos informativos en asuntos de interés público.

“Lo anterior refleja expresamente el efecto cascada consecuencia de los discursos estigmatizantes y del desprestigio de la labor de las y los periodistas por parte de López Obrador. Los dichos por una figura de poder desde una tribuna mediática masiva como la del presidente, tienen impactos palpables como las agresiones por parte de la sociedad en general que escucha sus discursos, los toma como verdaderos, y los repite, generando así limitaciones a la cobertura periodística de Reyna Haydée y de otras y otros periodistas”, señalaron.

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