Tras perder la contienda por la dirigencia nacional del partido, Porfirio Muñoz Ledo se dio a la tarea de crear el Modem: Movimiento Democrático de Morena, con el cual, dice, busca recuperar el partido desde adentro.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el diputado federal advierte que no sale de Morena a pesar de que se lo han sugerido otros legisladores federales.
Con Modem, argumenta, sebuscará modificar el actuar del instituto, pero, sobre todo, lograr que deje de ser un movimiento y se constituya como partido.
Advierte que se acabaron las imposiciones y los dedazos en la bancada de Morena en San Lázaro. Ante cualquier imposición, afirma, los diputados Modem se opondrán y el riesgo es que se genere una escisión.
¿Sigue en la lucha?
— Las cosas pasan y ya ocurrió lo que ocurrió. Me he dedicado a pensar las cosas y a proponer acciones que considero adecuadas a las circunstancias.
Primero, alertar a la conciencia cívica del país. He recibido un apoyo emocionante por parte de los militantes que, observo, son sensibles, responsables y mayormente inteligentes.
Mi tarea es darles un objetivo, al que llamo Modem: Movimiento Democrático de Morena, que también significa Movimiento Democrático de México.
¿Busca crear una corriente?
—Una partidaria y nacional.
¿Para dar una herramienta a la militancia?
—Una herramienta a la gente para defenderse y para seguir, [para] participar de modo exigente.
¿Exigente frente a quién?
—Frente a la autoridad y las autoridades del partido. [Que sea] exigente y con un grado suficiente de rebeldía.
¿Rebeldía y violencia?
—No, cero violencia. Rebeldía moral. Porque algunos, no pocos, me han pedido separarnos de Morena y hacer otro partido, pero no sólo las bases, también algunos diputados federales.
Les he dicho que no, que hay que recuperarlo, porque es nuestro. Nos han quitado el partido, vamos a reconquistarlo.
¿Quién se los ha quitado?
—Los dueños del dinero y los súbditos del dedo.
No el gobierno federal, sino quienes se dicen sus emisarios, como algunos disfrazados de superdelegados, ahora los [llamados] superdelgados.
¿Se queda en Morena?
—Desde luego, yo estoy en Morena. Ellos son los que no están, ni histórica ni éticamente. La mayor parte son advenedizos, son colados de la derecha o injertos, invasores de la derecha.
¿Este movimiento agrupará sólo a militantes?
—Esto se volvió un asunto de la sociedad civil. Le doy la importancia que tiene porque nunca, en la historia política del país o de otras partes, la elección interna de un partido ha merecido tanta atención. Hay la sensación pública de que esta elección determina muchas cosas: la mitad del poder público dentro de un año. ¿Qué hacer? Neutralizar en todo lo posible la corriente que se quedó de mala manera con el trofeo.
Señala el tema del dinero, pero el partido lo tiene.
—Ese es el tema: detenemos la línea del dinero y ponemos por delante a los principios o perdemos el país.
¿Qué caso tiene quedarse dentro del partido Morena con una corriente?
—Salirse tendría un costo altísimo, nos pasaría lo que al PRD, justamente no quiero eso.
¿Qué objeto tiene dividir al partido en dos?
—Tenemos, en conjunto, un diputado más en la Cámara, cualquiera que se vaya parte el proyecto en dos.
Necesitamos ganar el partido y lo vamos a ganar porque hay mucha dirigencia con nosotros.
Mario Delgado tiene mayoría en Morena en San Lázaro.
—No, porque como somos uno de diferencia, los diputados de Modem, todos tienen el sartén por el mango, de ellos depende que se apruebe o no.
Se acabó la ciega disciplina, empezó la democracia en la Cámara de Diputados en el grupo en el gobierno.
En algún momento de imposición por alguno de los de Modem, ¿se sale?
—No, pero el voto se condiciona, se acabó el lineazo, se democratiza, se hace lo contrario de lo que se venía haciendo.
En un proceso grave se divide en dos el partido y aguas.
¿Cuál es la búsqueda concreta de Modem?
—La disputa por la nación.
¿Se puede ganar un partido desde dentro del partido?
—A veces sí, a veces no. Yo estoy por no al dedazo, que es lo que se ve venir. Aquí no hay partido, hay movimiento, no nos han dejado crear el partido.
Uno de los actores, que fue mi amigo en la lucha democrática, me dijo: “Tu movimiento es contra Andrés Manuel [López Obrador]”. Su nombre: José Agustín Ortiz Pinchetti.
El tema es si el Presidente quiere partido o quiere seguir en el movimiento refrendario.
¿Mario Delgado ya lo buscó?
—No. Mario es instrumental. Delgado Carrillo no es hombre fuerte, es débil, hacia afuera es gritón. Es un hombre blando.
Ya va a tomar la dirigencia.
—Es como un director de orquesta, que ya levantó la batuta pero que no tiene músicos. A ver si tiene siquiera medio violín.
¿Modem que va a ser?
—Va a ser el depositario de los ideales del movimiento, del proyecto histórico y todos [en el movimiento] vamos a probar que lo somos. No estoy solo.