La sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH) que obliga al Estado mexicano a reabrir las investigaciones de la muerte de Digna Ochoa es paradigmática, porque representa una oportunidad para mejorar la protección a las personas que defienden derechos humanos, consideró el senador Emilio Álvarez Icaza, quien señaló que “Digna fue atacada en un momento donde había una condición de impunidad estructural, y eso sigue vigente”.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el legislador del Grupo Plural destacó que con este fallo se pide el fortalecimiento del Mecanismo de Protección a Personas Defensoras y Periodistas, y abrir un mecanismo para proteger a testigos.
“Se pide la constitución de un premio nacional que reivindique la labor de las defensoras en un momento muy crítico en este país, donde se mata a periodistas, se mata a defensores, se mata a protectores del medio ambiente, de manera que es un tema que lamentablemente tiene una tremenda actualidad”.
Puntualizó que la Corte IDH estableció que hubo grandes debilidades en la investigación, que se trastocaron el debido proceso y la debida diligencia, y señaló con mucha claridad que no se establecieron los debidos mecanismos, incluso de ahí se deriva que se tienen que ampliar líneas de investigación sobre, “por ejemplo, la posible y eventual participación de redes de narcocriminalidad, que vincularan a servidores públicos, incluidos los de las Fuerzas Armadas”.
Álvarez Icaza recordó que es un caso que tardó 20 años y que conoció muy de cerca.
—¿Después de 20 años usted cree que todavía se puede hacer justicia? —se le preguntó.
—Yo pienso que si hay voluntad política sí, por eso creo que tiene un componente de dos dimensiones. Un componente en materia de reivindicación y un componente de carácter paradigmático —dijo.
Indicó que en la atención a este caso se puede ayudar a proteger a más personas defensoras de derechos humanos, porque se requiere de elementos de política pública para defender a los defensores en un momento en que los defensores están bajo ataque y asedio incluso desde los más altos niveles del poder.