CDMX.- El presidente Andrés Manuel López Obrador negó que su gobierno haya pedido ‘llamar a cuentas’ al capitán Rafael Bolio Cuevas, piloto de Aeroméxico , luego de que éste le recriminara la cancelación del que sería el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en Texcoco.
“Nuestros mal querientes están diciendo que nosotros le pedimos a la empresa que lo llamara a cuentas, no es cierto, nosotros no hacemos eso, no somos iguales a los de los gobiernos anteriores, no somos autoritarios. Si no, imagínense, no tendríamos autoridad moral y además no tendríamos tiempo”, dijo.
Ayer, Aeroméxico informó, en un comunicado, que solicitó un informe detallado al capitán del vuelo AM533 , donde viajó el presidente, con el fin de cotejar lo ocurrido con los procedimientos establecidos en el reglamento interior de la empresa.
El reglamento de trabajo de Aeroméxico establece una prohibición a los pilotos para comportarse intencionalmente en forma que perjudique el servicio o el prestigio de la empresa.
López Obrador ejemplificó con ‘llamar’ a los dueños de medios de comunicación para ‘acusar’ a sus trabajadores por sus contenidos. “No acabaría, no trabajaría, me dedicaría nada más a eso”, expresó.
El mandatario también refrendó que el compromiso de su gobierno está en garantizar la libertad de expresión y de manifestación; y que el piloto siempre se dirigió a él con respeto y, de buena manera, le externó su inconformidad.