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Considerado durante décadas uno de los hombres más influyentes de la política en la ciudad de México , a la que se dedicó más de 30 años, el diputado federal Héctor Serrano Cortés anuncia su “retirada” a San Luis Potosí, para apuntalar el proyecto de su compañero de bancada, Ricardo Gallardo.
Hasta el año pasado fue cercano al exjefe de gobierno Miguel Angel Mancera , hoy senador del PRD, y antes al también exgobernante de la ciudad, Marcelo Ebrard , hoy canciller, pero Serrano expone en entrevista con EL UNIVERSAL que ha concluido su ciclo en la capital , cuya política dejó hace tiempo, y no tiene ninguna aspiración local, pero sí nuevos planes .
En la ciudad laboró en la delegación Iztapalapa, fue jefe delegacional en Venustiano Carranza, secretario de gobierno de la ciudad, responsable de reordenamiento urbano y vía pública y de movilidad, pero está hoy dedicado a sus tareas como diputado federal y empresario.
Su único vínculo con organizaciones –sostiene– es con las que luchan contra el cáncer, enfermedad de la que es sobreviviente.
--¿Qué nuevo rumbo tomará su carrera política?
-- Los ciclos se abren y se cierran, y cuando eso se entiende no causa conflicto. Yo cerré mi vida profesional porque no tengo mayores aspiraciones políticas en la ciudad, y cuando fui secretario de gobierno con Ebrad y con Mancera se cumplió un anhelo, pero por un lado estaba muy contento y por otro me informan que tengo cáncer, eso me cambió la forma de ver la vida.
Ahora he tomado la decisión de apoyar a Ricardo Gallardo, a quien conocí cuando se hizo mi coordinador en la bancada del PRD, me ha brindado su amistad y mi motivación principal es apoyarlo en su proyecto. Es joven, con posibilidades, y trataré de abonar a su fortalecimiento.
Cuando he acompañado al hoy presidente Andrés Manuel López Obrador, a Ebrard, a Macera, la motivación fue el cariño, lealtad y solidaridad, esa va a perdurar e igual mi motivación hoy con Gallardo.
-Cuándo renunció al PRD se pensó que iba a integrarse a Morena, ¿por qué no se dio?
- No creo en el proyecto de Morena, no están definidas las condiciones de democratización, por eso salí del PRI.
El PRD me dio espacio, trabajé 18 años, se cerró un ciclo pero no me inspira Morena. Han dicho que no van a aceptar ex perredistas, por mí que se queden sin cuidado.
- ¿Por alguna razón en particular?
- No creo en la condición de democratización interna, creo que hay una gran cantidad de vicios y además, a mi edad volver a empezar….
Hay cosas en política que si no se dan no se dan. De Morena no me convenció su modelo de partido, no lo critico tampoco, pueden hacer con su partido lo que mejor les plazca. Eso sí, hay muchos cuadros que merecen mi respeto y muchos no.
No sé si Ricardo nos direccione hacia militar en otras fuerzas, es una decisión que tomará él y yo lo acompañaré.
--El y su familia tienen mucha presencia, pero también han sido señalados…
-- Habemos políticos que no nos gustan los señalamientos y por no tenerlos estamos dispuestos a no participar en un cargo público, es mi caso. Hay otros a los que no les importa y mucho menos cuando son falsedades. Ellos se dedican a trabajar, yo no he notado nada extraño, no estaría con él si lo notara, pero él vivió un proceso y después de eso está en libertad .
En mi caso la denostación me lastima, pero siempre he sido respondón y si, fue una motivación para decir yo no quiero más exhibirme en una posición en la ciudad.
-Hay personajes no muy visibles, pero son el verdadero poder tras el trono, se dice que es su caso
--Primero habría que reflexionar qué significa el poder para cada quien. Yo siempre estuve al servicio del servicio público y fui creciendo en diferentes posiciones desde las más modestas a lo más encumbrado.
- ¿Dónde inició?
En Gobernación a los 17 años ya casado, con 2 hijos, estibando cajas en un almacén, lo que ya me cobró porque tengo una lesión en la espalda. Fui estibador, almacenista, fue jefe de kardex, jefe de unidad de almacenes, asistente del subdirector, y luego renuncié, sin nada.
Empecé a trabajar en Iztapalapa de kardista, encontré a mi mentor Juan José Osorio Palacios, con él tuve la oportunidad de ser Oficial Mayor de la ALDF y de la Cámara de Diputados.
Yo fui el que coloqué el tintero en la Cámara de Diputados para instalar la primera Legislatura en la que la oposición ganó la mayoría y el PRI no quería que se instalara, en 1997. Yo era el Oficial Mayor, abrí las puertas, coloqué el tintero para que presidiera un diputado opositor, Porfirio Muñoz Ledo, por eso me tiene tanto aprecio.
Por eso unos priístas me mandaron a la congeladora 3 años, repudiado por asumir un rol institucional y con sentido nacionalista y patriota. Me fue como en feria. Por eso ahora que Porfirio llegó a la mesa me dio un apretón de manos muy fuerte y me dijo: hace 21 años.
--Ese veto lo que revela es que la política ¿es traicionera?
La política no es traicionera, sino los hombres. En mi caso ni Juan José, López Obrador, Ebrard, Mancera jamás nadie podrá acusarme ni de traidor ni de desleal.
Esto es como cuando te divorcias y adquieres nuevas nupcias, tu lealtad es con quien te casas no con quien estuviste casado porque la lealtad es una obligación.
Y siempre queda la gratitud a todos ellos, pero en la parte política cerré mi ciclo. Ahora voy a trabajar con Ricardo, no puede acusarse traición.
--Este retiro de la política capitalina es con cierta decepción por los últimos acontecimientos, se le señala de estar detrás de algunas movilizaciones.
- No, milité un tiempo en el PRI, pero siempre en el ala izquierda, y ahora tenemos un gobierno federal y local de izquierda, entonces daré todo lo que esté de mi parte.
Se requiere estar cerrado, obtuso, para atacar a un presidente al que hay que darle la oportunidad y también apuesto por la ciudad. Yo voy a abonar, y no es coqueteo, no quiero trabajar en el gobierno, es un asunto de convicción.
Durante muchos años como que me cargaron pecadillos y no le daba importancia. A veces en la administración pública algunas decisiones pueden lastimar a alguien sin querer y también entiendo que algunos se sienten agredidos porque no fueron candidatos a algo y pueden generar condiciones adversas argumentando cosas sin atender a la realidad o a la verdad.
Yo tuve una gran capacidad de establecer relaciones de aprecio, afecto con muchos dirigentes de la ciudad de todos los partidos.
Recientemente se ha argumentado que si fomento o participo en acciones que pueden desestabilizar el trabajo de la ciudad, de manera contundente lo digo: por su puesto que no tengo ningún interés en eso, y aunque tuviera, con un poquito de inteligencia me daría cuenta que no hay condiciones ni siquiera políticas para poderlo hacer.
Pueden pensar de mí que tengo algún grado de perversidad, eso lo pueden pensar, siempre se piensa eso del político, pero por favor que no piensen que estoy obtuso, tonto o loco, ¡no¡, me retiré del trabajo político local hace 4 años.
Entonces que nadie se cobije pensando ´esta travesura la hago yo´ y se la cargo a Serrano porque es el que tiene las capacidades. No es así.
Yo ya no tengo, lo que quiero es armonizar. Si hay un prejuicio para no recibir mi aportación y mi expertise sin ningún interés, bueno (pero) yo soy un hombre que ha sanado su vida, tengo estabilidad emocional y personal que no aspira más.
Diría: la única forma de que te agarren haciendo chingaderas es haciéndolas, no van a tener evidencia de nada porque no estoy haciendo nada. Quizá haya quien para posicionarse o justificarse digan … la mano de Serrano. No, mejor me voy, para que se vea que no tengo interés.
-Ahora que se va ya no tendrán villano favorito
-Tal vez se busquen a otro. Yo no me reúno con líderes desde antes de ser diputado, ni con dirigentes de taxistas, comerciantes o activistas, salvo los de lucha contra el cáncer, pues he dado conferencias de sobreviviente del cáncer.
Hoy ando en mi proyecto empresarial y quiero llevar la fiesta en paz. No tengo nada que ver en los temas de la ciudad y qué mejor forma de acreditarlo que poner tierra de por medio.
