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El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció el desabasto de gasolinas —que afecta a la Ciudad de México y nueve entidades del país— y exhortó a la población a resistir los inconvenientes que ha dejado su estrategia contra el robo de hidrocarburos; a que actúe con serenidad y tranquilidad. Responsabilizó a sus antecesores de ser omisos ante el huachicoleo.
“En algunas gasolineras va a haber colas; que se resista”, expresó ayer en Palacio Nacional. En su conferencia de prensa matutina, donde lanzó un mensaje y un spot de Pemex, exhortó a que los ciudadanos actúen “con prudencia, serenidad, tranquilidad, sin caer en pánico, ni hacer caso a información alarmista o tendenciosa” de quienes están a favor de un régimen corrupto que, dijo, está a punto de acabarse.
Ayer, el desabasto de combustible en diversas entidades confrontó a las fuerzas políticas en el Congreso de la Unión —donde se citó a reunión de trabajo a integrantes del gabinete presidencial para explicar la situación—. Mientras que Morena defendió la estrategia presidencial contra el robo de combustible, la oposición deploró que se afecte a millones de mexicanos, las actividades productivas y de servicios.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llamó al gobierno de la República a garantizar la venta de gasolina en el país y con ello prevenir la vulneración de los derechos humanos de los mexicanos y Pemex exhortó a la población a no caer en la especulación, al tiempo que garantizó el inventario suficiente de combustible y el abasto a las entidades afectadas.
López Obrador se negó a dar una fecha para normalizar el abasto de combustibles y alentó a los ciudadanos a que si tienen gasolina en sus automóviles, eviten acudir a comprar más en estos días, porque eso retrasa el proceso para normalizar el abasto, el cual se está realizando a través de pipas.
Aunado a ello, acusó de omisión en el robo de combustible a sus antecesores: “Las autoridades sabían. Tolerancia, vamos a decir, de todos, omisión. Lo sabían todos, desde Fox, Calderón, todos. No, sobre este tema no [hablamos con Peña Nieto]. Es evidente que se sabía, tan se sabía que el sistema de información lo encontramos establecido”.
Dijo que él resistirá todas las presiones que sean y no abrirá los ductos para abastecer por esa vía hasta que se normalice la situación y se evite el robo de combustible y pidió el respaldo para que no venza la delincuencia y “que entre todos triunfemos y acabemos con el robo de combustible.
Afirmó que ayer el gobierno estaba por resolver el problema, pero hubo un accidente en una toma clandestina en un ducto que corre de Tuxpan a Azcapotzalco. Dijo que el martes se robaron sólo 27 pipas de combustible.
Estalla debate en la Permanente. Ante esta crisis, la Comisión Permanente acordó llamar a una reunión de trabajo el próximo lunes, con la Tercera Comisión de la Permanente, a los secretarios de Hacienda, Carlos Urzúa, y de Energía, Rocío Nahle; al director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, y el titular de Profeco, Ricardo Sheffield Padilla.
En el marco del debate del pleno, el líder de los diputados del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, afirmó que la crisis por desabasto de gasolina en nueve entidades del país mostró que “el gobierno no puede por sí mismo solucionarla” y ofreció el apoyo de su partido para superar el problema. “Tenemos un gansolinazo”.
La diputada del PT, Claudia Domínguez, dijo: “Paciencia y tolerancia son nuestras únicas armas contra el crimen organizado de cuello blanco”.
El coordinador de la bancada senatorial del PRD, Miguel Ángel Mancera, criticó el cierre de ductos en estados que no tienen el mayor número de tomas clandestinas.
El diputado Héctor Yunes (PRI) lamentó que por la estrategia contra el huachicoleo, “algunos estados han comenzado a convulsionarse”.
