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Un magistrado federal negó enviar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) el amparo con el que Mario Aburto, único sentenciado por el homicidio de Luis Donaldo Colosio, buscaba revertir la condena que le fue impuesta por este crimen.
En el amparo, Aburto afirmó que fue torturado para confesar que cometió el crimen por el que fue condenado a 45 años de prisión, y que su familia también fue víctima de esta conducta.
Bajo este argumento, su defensa pidió ante el Primer Tribunal Colegiado en materia Penal en el Estado de México enviar el caso a la Corte para que ejerza su facultad de atracción.
El magistrado ponente, Jorge Arturo Sánchez Jiménez, indicó que el asunto no reviste la importancia necesaria para llevarlo al Máximo Tribunal, por lo que confirmó que el Colegiado será el que resuelva el amparo.
Los abogados que representan a Aburto son defensores públicos y, al igual que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), han asegurado que tanto el sentenciado como su familia fueron torturados para que se declarara culpable del crimen y se mantuviera la versión del asesino solitario en el caso Colosio.
