Mario Casarrubias Salgado, identificado como líder de Guerreros Unidos —grupo implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa—, murió ayer por Covid-19 en el Hospital Central Militar.

De acuerdo con la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa, Casarrubias, Sapo Guapo, fue trasladado el 8 de julio del Centro Médico Adolfo López Mateos en Toluca, Estado de México, al hospital militar, donde murió.

El hombre permanecía recluido desde 2017 en el penal federal El Altiplano acusado de delincuencia organizada.

La comisión para el caso Ayotzinapa señaló que el supuesto líder criminal padecía de diabetes tipo II e hipertensión arterial sistémica. “Durante su hospitalización se le brindaron las atenciones hospitalarias de alta especialidad y trato humanitario, incluso para establecer comunicación a distancia con su familia”, precisó.

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