Ante las agresiones que sufre la prensa en México, organizaciones de la sociedad civil activaron protocolos a nivel nacional con el propósito de monitorear la violencia dirigida contra periodistas y medios de comunicación en el contexto de las elecciones municipales, estatales y federales de 2024.
El monitoreo dio inicio el pasado 1 de marzo y culminará el próximo 31 de julio.
Cabe recordar que el próximo proceso electoral será el más grande de la historia, con la renovación de más de 30 mil cargos en el país.
Las organizaciones que se suman a esta acción son: la Red Rompe el Miedo, en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers, Comunicación e Información de la Mujer, A.C. (CIMAC), Perteneces y Propuesta Cívica.
Durante el proceso electoral del 2018, la Red Rompe el Miedo documentó 185 agresiones en contra de periodistas, de las cuales 75.9% fueron cometidas por integrantes y candidatos de partidos políticos, así como por funcionarios públicos.
“Los contextos electorales se caracterizan por ser los más adversos y violentos contra el ejercicio de la labor informativa en México”, aseguró la Red Rompe el Miedo.
Uno de los objetivos centrales de dicha activación es fortalecer de manera preventiva, mediante herramientas y diferentes procesos, las redes de apoyo que contribuyan a garantizar la protección y seguridad de periodistas y defensores de derechos humanos, así como establecer una reacción rápida ante las agresiones que puedan vivir durante el periodo electoral.
El día de la jornada electoral, el próximo 2 de junio, la Red Rompe el Miedo, en conjunto con diversas organizaciones de la sociedad civil, establecerán un centro de monitoreo nacional. El espacio será un punto de coordinación para gestionar redes de protección, denominadas “nodos”, integradas por periodistas y defensores de derechos humanos.
“Estos puntos facilitarán la articulación de medidas de prevención y protección, así como la documentación, verificación y visibilización de las agresiones, además de los actos que busquen obstaculizar el ejercicio del derecho a la libertad de expresión y a la información”, estableció la organización.
Dichos organismos recalcaron que la cobertura electoral representa uno de los mayores riesgos para los periodistas en México.
“Durante el proceso electoral de 2018, que incluyó elecciones presidenciales, hubo un total de 185 agresiones contra la prensa, es decir, se cometió una agresión en las elecciones cada 10 horas”.
Agregaron: “Es fundamental que la prensa sea libre para cubrir las elecciones de 2024, ya que constituyen un acontecimiento crucial para la vida democrática del país. La información precisa y detallada sobre los candidatos, las propuestas políticas y el desarrollo de los comicios es esencial para que la ciudadanía tome decisiones informadas y ejerzan su derecho al voto de manera consciente. Además, una cobertura periodística amplia y desde opiniones plurales y diversas contribuye a la transparencia y la rendición de cuentas en el proceso electoral, promoviendo así la integridad y la legitimidad de los resultados”.
También hacen un llamado al gobierno a que garantice la protección de periodistas mediante medidas concretas que sean tanto preventivas como reactivas, para asegurar su protección y seguridad durante el ejercicio de su labor periodística en el periodo electoral.
De igual forma, exhortaron a los candidatos y a los partidos políticos a “promover un proceso electoral donde se puedan discutir las múltiples propuestas de los candidatos, propiciando así discusiones plurales, diversas y el encuentro de opiniones”.
Asimismo, también hicieron un llamado a abstenerse de realizar cualquier acto que ponga en peligro la vida, la libertad, la integridad y la seguridad de los periodistas debido a su labor o que de alguna manera se inhiba u obstaculice la realización de la cobertura periodística.
Del 3 de enero al 3 de agosto de 2018 la Red Rompe el Miedo documentó un total de 185 agresiones, de las cuales 96% fueron perpetradas en contra de la prensa; el resto, 3.78%, equivalente a siete agresiones, fueron una en contra de un familiar de un reportero, dos en contra de observadores electorales y cuatro en contra de civiles.
Las agresiones más recurrentes fueron: intimidación y hostigamiento, con 40%; bloqueo, alteración o eliminación de información, con 17%, y ataques físicos, con16.2%, aunque también se registraron diversos casos de amenazas, que corresponden a 14.59%, y allanamientos y privación ilegal de la libertad, que alcanzaron 3.78%.
También la red documentó que del total de agresiones realizadas, es decir, 38.9% (equivalente a 72 agresiones), las cometieron integrantes, militantes o simpatizantes de partidos políticos, seguidas por servidores públicos, que representa 37%, equivalente a 69 agresiones, mientras que el crimen organizado perpetró 3.2%, con seis agresiones.
Los estados que más agresiones registraron fueron Coahuila, Puebla, Campeche y Veracruz.